Rescatadores se ven demacrados y agotados Después de horas de trabajar en un calor sofocante en la difícil búsqueda de víctimas entre los escombros del edificio derrumbado de Surfside, Miami, que dejó hasta ahora. 10 muertos y unos 150 desaparecidos.
Los 300 bomberos El condado de Miami-Dade, apoyado por refuerzos de todo el estado de Florida, se desplegó tan pronto como 55 apartamentos en el complejo Champlain Towers colapsaron en las primeras horas del jueves.
En ese lío de hierro y hormigón las operaciones avanzan demasiado lento para algunas familias de las víctimas.
«Parece lento, pero nos estamos moviendo lo más rápido posible«, dijo Maggie Castro, miembro de la Unidad de Búsqueda y Rescate No. 1 del Departamento de Bomberos de Miami-Dade, quien no obstante comprende la ira y la frustración.
«Es una operación difícil», interrumpida por tormentas eléctricas regulares y un incendio que tardó mucho en controlar, agregó en declaraciones a la AFP.
«Tenemos que buscar entre una enorme pila de escombros para metódico y estratégico«, explicó Castro, de 52 años, 17 de los cuales en el Departamento de Bomberos de Miami.
«Hay áreas con posibles bolsas de aire donde puede haber sobrevivientes. Si nos apresuramos hacia los escombros de manera agresiva, destruimos esos espacios. «
A mano y con perros
Los primeros rescatistas, que llegaron poco después del desastre, lograron sacar con vida a un adolescente de las ruinas. Tiempo, aún no se han identificado restos humanos.
Dado el lento aumento en el número de víctimas a pesar de la magnitud de la tragedia, Castro dijo que el «la gente probablemente estaba en la cama cuando sucedió», por lo que hay pocas posibilidades de encontrar muchos a la vez.
Recuerdo en Miami. Foto AP
El viernes se desplegaron maquinaria pesada, dos grúas y una excavadora. Cuando se levanta una losa de hormigón, los rescatistas «trabajan a mano, sacando los escombros con baldes», indicó.
Entre 50 y 60 rescatistas y unidades de perros trabajan constantemente en el sitio, respaldado por tecnología de imagen y sonido para localizar bolsas de aire.
Moises Soffer, voluntario de la organización judeo-latinoamericana Cadena International, participa con Oreo, su perra pomsky de casi dos años, que está especialmente entrenado para encontrar supervivientes.
«La dejo ir y ella va a donde quiere. En huecos, espacios donde un adulto no puede ir, en lugares inestables gracias a su peso ”, dice su maestro, un mexicano de 36 años.
Si Soffer detecta peligro, el reconocimiento se realiza con la correa y La perra marca «la dirección» seguir.
Oreo puede trabajar de cinco a seis horas seguidas, con descansos de 20 minutos. Pero en Surfside, lo hace temprano en la mañana y al final de la tarde debido al calor y la humedad.
Soffer no está autorizado a decir si su perro detectó supervivientes, pero asegura que permanecerá «todo el tiempo que sea necesario».
Aunque la esperanza de encontrar víctimas vivas disminuye día a día.
«Escuchamos escombros que caen, metal retorcido, pero no hemos escuchado ruido humano«Dijo Castro.
«Es difícil, agotador y emocionalmente pesado cuando trabajamos durante horas sin encontrar a nadie ”, admitió.
Ante la impaciencia de las familias de las víctimas, incluidos muchos miembros de la comunidad judía, el condado dio la bienvenida a un equipo de diez expertos militares israelíes que se unió a los equipos de rescate.
Castro recuerda que su unidad tiene experiencia: participó en labores de búsqueda y rescate después el terremoto de Haití de 2010 y en Nueva Orleans después del huracán Katrina en 2005. Algunos de los miembros de su equipo también participaron en operaciones de socorro después de los ataques de Oklahoma City en 1995 y el 11 de septiembre de 2001.
Agencia EFE
PB
Fuente: Clarin.com