Dembow es el nombre de un ritmo caribeño bailable nacido en República Dominicana, con raíces en el dancehall jamaicano y que inspira composiciones de artistas de reggaetón. Y también es el nombre de la nueva hamburguesería que lanza el cantante colombiano Maluma.
El snack bar funciona solo para delivery y entrega hamburguesas y hot dogs en paquetes con frases como “Agradecimiento por el sabor latino”, “Con todo el flow latino” y “Hermoso por fuera y por dentro”, algunas de ellas en español. En la foto de un volante, Maluma usa lentes de sol y posa como si fuera a morder una hamburguesa.
La hamburguesería digital de la estrella colombiana, conocida por éxitos como «Hawai» y «Sobrio», fue lanzada hace tres semanas en cuatro países: Colombia, México, Perú y, por supuesto, Brasil. En total, el servicio se distribuye en 17 ciudades. Los pedidos se realizan a través de la aplicación Rappi.
La casa apuesta por las hamburguesas estilo super aplastadas, con discos de carne muy finos que se aplanan en el plato durante apenas unos segundos, formando una costra crujiente.
A pesar de los números impresionantes, el negocio parece haber comenzado con el pie izquierdo en São Paulo. Cuando Guía ordenó los snacks de la marca para delivery, el último día 10, una semana después del debut, la ensalada para sándwiches y hot dogs no estaban disponibles.
Solo quedaba pedir la hamburguesa más sencilla de las cinco de la carta, la clásica. Se elabora con dos discos de carne de 60g, dos lonchas de queso cheddar fundido y una salsa llamada Magia. El combo, con gaseosa, papas fritas y esa salsa, cuesta R$ 49,90.
El condimento se entrega por separado, en un frasco pequeño, que llegó abierto e hizo un desastre en la bolsa de entrega. Lo cual no fue un problema: está hecho con mayonesa, salsa de tomate, mostaza y pepinillos, pero tiene un sabor indefinido, que no se parece a ninguno de los ingredientes. Terminó siendo marginado.
Las papas fritas, cortadas al estilo arrugado, se volvieron gomosas y tenían un sabor artificial tan pronto como se enfriaron.
En un segundo pedido, realizado el mismo día, pero de noche, aparecieron los perritos calientes. Los sabores no son muy ortodoxos. El elegido para la degustación fue el más sencillo de la lista, el Philly, con salchicha, cebolla caramelizada y queso gruyère como relleno sobre un pan tierno.
Las otras opciones son Pizza Hot-Dog, con salsa de tomate, chorizo y cubierta con queso mozzarella y pepperoni, y Do Bairro, que lleva salsa alioli, chorizo, dados de piña, tocino picado, queso mozzarella y papas chips —sabor también uno de los hamburguesas Todos los perritos calientes cuestan R$ 27,90. Finalmente, la marca ofrece brownie y galletas de postre.
En São Paulo, los snacks son preparados por la marca Get Smashed, renovada con el rostro de la cantante colombiana. Las entregas se realizan en diez barrios de São Paulo: Santa Cecília, Lapa, Berrini, Itaim Bibi, Pinheiros, Bela Vista, Paineiras, Vila Guilherme, Santo Amaro y en la región de Raposo.
No todos los elementos del menú están disponibles todos los días. Tras consultas al servicio en diferentes días y horarios, el menú ofrecido carecía de estabilidad.
Al final de la comida, queda la impresión de que el snack bar se preocupa más por la marca que por la calidad —y, con eso, entrega un servicio de principiante, a pesar de la marca del colombiano—. Entre tantas opciones de snack bar en las apps de delivery, la de Maluma no se destaca. Pero tal vez complazca a sus fans.
Noticia de Brasil
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