Argentinos pagan ropa 86% más cara que en Brasil y México

Una investigación de la Bolsa de Comercio de Córdoba reveló que Los argentinos pagan mucho más caro la ropa y otros productos como las PC que en los países vecinoscomo Brasil y México.

Según la encuesta, el estudio alertó sobre un «proteccionismo ineficiente» y señaló que «pese al costo fiscal que asume el Gobierno para promover la industria nacional, la la sustitución de importaciones locales es insuficiente y, en muchos casos, aumenta el precio asumido por los consumidores«.

Según la entidad, «con el argumento de que la producción local permite ahorros en costos y divisas, El Gobierno afirma que ningún sector está de más y promueve, directa e indirectamente, normas y medidas para proteger y promover la industria nacionalenfocado a la sustitución de importaciones, como ya sucedió en varias ocasiones a lo largo de la historia argentina».

En este contexto, el Instituto de Investigaciones Económicas (IIE) de la Bolsa de Comercio de Córdoba estimó que este año yl costo de los esquemas de promoción Supondrá alrededor del 0,8% del PIB, lo que equivale al 30% de la meta de déficit fiscal acordada con el Fondo Monetario Internacional (FMI) o del presupuesto de todas las obras públicas que realice la Nación en materia de energía, transporte, educación, vivienda y agua en 2021. Sin embargo, afirmaron “Los países no son competitivos para producir todo”.

La tecnología es más cara en Argentina

Según la investigación, el estudio concluyó que «los precios de los modelos [de computadoras] comercializados en Argentina son más caros en dólares que los fabricados en los otros dos países», México y Brasil.

“Este es un concepto básico de la economía moderna, que el IIE ratificó con un estudio en el que evaluó los precios de los productos que tienen protección del Estado, y llegó a la conclusión de que medidas implementadas por el Gobierno, en muchos casos, incrementan el precio asumido por los consumidores”.

«Con Brasil solo hay un modelo de computadora que coincide, y cuesta hasta un 10% más caro en el mercado local; mientras que con México hay más variedades en común, y los valores son entre 19% y 86% más altos a nivel local”, precisó. El modelo más vendido cuesta entre 11% y 21% más que su equivalente en Brasil. y es 58 % más caro que México.

“El único producto que se dejó de fabricar durante el gobierno de Macri, las computadoras, es el que crece por encima de la inflación. Hace siete años que no se fabrican computadoras en Tierra del Fuego”, detallan desde la industria electrónica.

“Esto está pasando por la decisión de tener dejó de fabricar computadoras en el país, donde hoy se hacen unos educativos y nada más”, agregaron y explicaron que, además, a nivel mundial, debido a la alta demanda, quienes deciden optar por enviar productos a otras latitudes primero porque aquí se demoran en pagan y suele haber problemas”. Mandan cuando quieren y cuando pueden, lo que significa que hay poca oferta en el mercado. En momentos como estos, los precios se disparan y los productos que están disponibles no son nuevos ni de última generación, como es el caso de los celulares o televisores, cuyos precios crecen por debajo del promedio informativo”, detallan desde la industria.

Ropa, zapatos y vestidos, también más caros

Más allá de los electrónicos, la Bolsa señaló que “Entre los más protegidos se encuentran también los sectores textil y de la confección”.

“Las Licencias No Automáticas (LNA) son la principal herramienta aplicada en este caso: desde 2017 se observa una reducción paulatina de las NLA, principalmente para los primeros eslabones. Hoy afectan en promedio al 56% para toda la cadena de valor. las prendas tienen una protección casi absoluta: 94 por ciento«.

“En abril, cuando el Índice de Precios al Consumidor (IPC) general se ubicaba en 6%, los precios de vestuario y calzado aumentaron 9,9%. En la comparación interanual, los valores son 58% y 73,4%, respectivamente”. Al igual que con el electrónica«Los argentinos pagan más por la ropa que sus pares en la región».

Ropa en Argentina, cada vez más cara.

“Un vestido apenas cuesta un poco más que en Brasil y 25% más que en México. Un jean, 29% más que en Brasil y 36% más que en México. En zapatos de vestir la diferencia es de 59% con un par brasileño y 38% con un mexicano». El calzado deportivo presenta la mayor diferencia general: 50% más que en Brasil y México. Asimismo, en el mercado local también cuestan más que en Nueva York, Londres o Tokio.

«Él Zapatillas deportivas tienen la diferencia total más grande: 50% más que en Brasil y México. Asimismo, en el mercado local también cuestan más que en Nueva York, Londres o Tokio, tres de las ciudades más caras del mundo”, dice el informe, y agrega: “Los resultados prueban que la la sustitución de importaciones es ineficiente, ya que no abarata el costo asumido por los consumidores locales; al contrario, en más de una ocasión, las aumenta”.

“El desarrollo de industrias enfocadas en los eslabones finales de la cadena de valor no nos permite eliminar la dependencia de las importaciones y, naturalmente, presentan un menor valor agregado a la producción.

¿Cómo ganar competitividad?

Para ganar competitividad y mejorar la calidad de vida de la población «se debe promover el desarrollo de industrias que aprovechen el comercio internacional de la mano de la especialización».

“Esto permitirá la creación de más y mejores empleos, y que Los argentinos tienen acceso a más productos y servicios de mejor calidad y a mejor precio”, señaló el estudio de Fabio Ventre, subdirector del Instituto de Investigaciones Económicas de la Bolsa de Comercio de Córdoba y las investigadoras Miranda Bandoni y Valentina Vijarra.

En marzo pasado, la Bolsa de Valores de Córdoba había emitido un duro comunicado en el que aseguraba que los empresarios no tienen la culpa de la inflación y criticaba las «medidas ineficaces» del gobierno. Y a principios del mes pasado, el presidente de la entidad, Manuel Tagle, dijo en entrevista con Infobae que el gobierno debe dejar de aplicar «recetas fallidas» y advirtió sobre el riesgo de una espiral inflacionaria, aunque también criticó la idea de «dolarizar» la economía.