Otro duelo entre selecciones argentinas por Libertadores s de nuevo una polémica con el VAR como protagonista… Así como en River-Vélez le mostraron 43 veces la supuesta mano de Suárez a Tobar y convencieron al chileno de anular el gol del Millonario, similar situación se vivió en el duelo entre Fortín y Talleres de trabajo por el partido de ida de los cuartos de final de la Copa, aunque en este caso no lograron cambiar la apariencia del árbitro.
Una de las repeticiones que vio Roldán.
Al término del primer tiempo en Liniers, Wilmar Roldán fue llamado desde la grada (a cargo del venezolano Juan Soto) para revisar un posible penal a favor del equipo del Cacique Medina: una supuesta falta de Lucas Suárez sobre Walter Bou. Con el tiempo agotándose, el árbitro se acercó al monitor del terreno de juego para observar de cerca la acción: ¡le mostraron 35 repeticiones! Aunque en realidad hubo unos cuantos más, porque Roldán tuvo que darse la vuelta para pedir a los jugadores de ambos equipos que salieran y dejó de ver la pantalla unos segundos…
Suárez no tocó el balón, pero al parecer tampoco echó de menos a Bou.
En ninguna de las imágenes que le envió el VAR se pudo observar un contacto claro entre el defensa del T y el delantero del Fortín. Desde diferentes ángulos ya distintas velocidades, Roldán miraba la jugada una y otra vez. Sin embargo, a diferencia de lo que sucedió con Tobar en el Monumental, el colombiano se quedó con lo que vio en vivo: No cobró la multa a pesar de la insistencia de la cabaña.
Roldán es un árbitro que tiene varios antecedentes con el VAR. Fue el árbitro de la polémica llave de la semifinal entre River y Lanús: en el partido de vuelta no sancionó penalti por mano de Iván Marcone y no expulsó a Román Martínez por golpe a Ariel Rojas. Esa noche, en la Fortaleza, el cafetalero ignoró los llamados de la choza. Debido a su pobre desempeño en esa serie, la Conmebol dejó de tomarlo en cuenta para partidos decisivos por un tiempo.
En el Mundial de Rusia fue criticado por abusar del VAR para comprobar errores y también por sancionar un polémico penalti a favor de Arabia Saudí contra Egipto en la fase de grupos. Yn Liniers, no fue la primera vez que decidió no ejecutar un penal pese a la convocatoria desde la grada: en el Argentina-Perú por las Eliminatorias rumbo a Qatar, fue a revisar una inexistente falta de Armani sobre Cueva.. Perdió unos tres minutos viendo repeticiones para finalmente no recibir el pago.
Además, en el último Ecuador-Brasil (también por las Eliminatorias) el VAR cambió cuatro errores, entre ellos dos rojos del portero Alisson, que tuvo que corregir tras ver las jugadas.
El polémico movimiento
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Fuente: ole.com.ar/