Un canal de venta imprescindible
Desde la era de las puntocom hasta la actualidad, podemos ver cómo las plataformas digitales han evolucionado para convertirse en un canal de ventas esencial. De hecho, para muchas pequeñas empresas y nuevas empresas, es el único canal posible. Internet llegó a obstaculizar y al mismo tiempo contener los negocios, para conectar a las partes a través de la red. Por ello, lo que antes era un complemento, ahora es fundamental para la vida y también para el desarrollo de todo tipo de negocios o prestación de servicios. Internet se ha convertido en un escaparate virtual de negocios y con este cambio el marketing digital ha adquirido un papel fundamental. Ya no es necesario tener una tienda en la calle de una prestigiosa avenida o en un importante centro comercial. Hoy, gracias a Internet, es posible vender y tener una marca que no tiene presencia física en una tienda.
Internet ha revolucionado el mundo empresarial. Permitió conectar la oferta con la demanda (comercio electrónico); reunió a usuarios con intereses similares (foros, redes sociales, blogs); eliminó las fronteras geográficas y ayudó a acelerar los procesos. El aumento y mejora de la conectividad dio lugar a lo que se denomina “Internet de las cosas”, llevando los procesos productivos y logísticos a otro nivel. Estamos asistiendo a una época en la que circulan camiones, los robots operan en fábricas de diferentes industrias, la Inteligencia Artificial revoluciona el mundo de la medicina, entre otros.
Asimismo, Internet también ha transformado muchas empresas que tradicionalmente se han visto cara a cara. Por ejemplo, durante décadas, el negocio de almacenamiento consistió en alquilar un espacio, mudarse a esa ubicación física y dejar las cosas por un tiempo y costo específicos. Se parece más a un negocio inmobiliario que a un negocio tecnológico. Pero con Internet existía la posibilidad de guardar cosas sin tener que salir de casa, sin tener que moverse físicamente y cuidarse.
Internet pone al usuario en el centro, dándole el poder de elegir cómo y cuándo quiere hacer las cosas. Podemos ver la serie que queramos en el momento que queramos; o pedir una comida por teléfono celular; o llamar a un coche para que nos recoja cuando lo necesitemos. Esto es bajo demanda. Y así es como Space Guru puede ofrecer un servicio de ahorro bajo demanda: tú llamas, haces un presupuesto (lo haces tú mismo en tu celular) y nosotros nos encargamos del resto.
Los usuarios valoran cada vez más el on-demand, la posibilidad de autogestión, la solución y la personalización. Quieren que las propuestas se adapten a ellos, por ejemplo, en nuestro caso, cobramos el servicio solo por el espacio que ocupan las cosas de las personas. Cada cliente es diferente y tiene sus necesidades, y estas necesidades hoy en día pueden ser satisfechas por la red, por Internet.
De oficinas a aplicaciones
Definitivamente, hoy en día Internet es fundamental, tanto es así que cada persona tiene más de un dispositivo con conexión a Internet. Y sin desconectarnos, cada día la vida se empieza a complicar, porque es como una extensión de nuestro cuerpo y la base del funcionamiento de todos los negocios, empresas, servicios, etc. Todo ha cambiado con el avance de Internet en nuestras vidas, trabajos, oficios, profesiones e incluso lo que estudiamos, el futuro llegó hace mucho tiempo y más rápido de lo que imaginamos, dependerá de nosotros y de la adaptabilidad que tengamos para no quedarnos desde fuera de la era digital, donde todo pasa por una pantalla. De hecho, seguro que leerás esta nota a través de un dispositivo gracias a que dispone de Internet.
Fundador de la startup Space Guru
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Fuente: www.ambito.com
Esta nota fué publicada originalmente el día: 2021-05-16 03:00:00