El presidente mantiene su crítica a la política internacional de EE.UU., pero hace un guiño de cara a su próxima visita a la Casa Blanca
Por Pablo Sieira
06/09/2022 – 21:10
el discurso del presidente Alberto Fernández en la IX Cumbre de las Américas nos permitió vislumbrar parte de su estrategia para acercar posiciones a su homóloga en Estados Unidos, Joe Bidensin descuidar la reproches a la política internacional del país norteamericano, frente al reunión bidireccional que ambos se mantendrán próximo mes.
los intento de «seducción» para el gobierno de EE.UU. se centra en la «transición ecológica» para la economía y la importancia de la región (especialmente Argentina) en términos de alimentos y de Energíaelementos críticos para el mundo en medio de la guerra entre Rusia y Ucrania.
Fernández enfatizó estos tres temas en el discurso que pronunció ante los jefes de Estado reunidos en Los Ángeles, California. Si bien ratificó sus críticas a la decisión de Biden de no invitar a Cuba, Venezuela y Nicaragua a la cumbre (algo discutido previamente entre la diplomacia argentina y estadounidense) se cuidó de no quemar los puentes.
El objetivo era preparar el terreno para la reunión que tiene prevista con Biden en la Casa Blanca el 25 de julio, probablemente la reunión bilateral más importante de su mandato. Por ello, Fernández apuntó a la cuestión ecológica que ocupa un lugar central en el horario biden y su prédica contra el cambio climático.
Fernández y Biden reiteraron gratos gestos durante la Cumbre.
Alberto Fernández, Biden y tres temas clave
«Os propongo dos grandes objetivos: organicemos continentalmente la la producción de alimentos y proteínas y desarrollar nuestra enorme energía potencial y minerales críticos para la transición ecológicaFernández expresó ante la mirada de Biden.
Esa propuesta parecía haber sido parte del trabajo previo realizado sobre el discurso por el canciller Santiago Cafiero, el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, y el embajador en Washington, Jorge Argüello, junto al Presidente, para tratar de equilibrar el discurso. entre críticas y coqueteos.
Y es que, en un apartado anterior donde repasaba los males que aquejan a América Latina y el Caribe (como “el peso medio de la deuda externa” por encima del 77% del producto bruto de la región o la informalidad laboral por encima del 50%), remarcaba: «¿Por qué sufrimos tantas penalidades si nuestra tierra nos ha dotado para producir alimentos y energía como muy pocas regiones del mundo?».
Así, insistió en el potencial de la región en estos dos campos, sumado a la capacidad de producir energía limpia, tema que ya entró en la agenda de Fernández y está entre las prioridades de Biden.
Todo esto, combinado con un reclamo nada inocente para que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) “retorne a su gobernabilidad en América Latina y el Caribe”. Esa propuesta trató de aprovechar la promesa que Biden hizo un día antes de hacer cambios en esa entidad financiera clave para la región. Y no fue el único guiño.
Fernández y una visita a EEUU entre críticas y coqueteos.
Entre la crítica y el coqueteo
El discurso de Fernández fue crítico pero no incendiario. Tras destacar su condición de presidente de la CELAC, el mandatario cuestionó «el orden global» en alusión a la política exterior de Estados Unidos.
“Desde la periferia en la que estamos situados, América Latina y el Caribe miran con dolor el sufrimiento que sufren los pueblos hermanos. Cuba soporta un bloqueo de más de seis décadas impuesto en los años de la Guerra Fría y Venezuela tolera otro mientras dura una pandemia. que asola a la humanidad arrastra millones de vidas”, lanzó Fernández.
Entre las críticas al papel de la Organización de Estados Latinoamericanos (OEA) ante el «golpe de Estado en Bolivia» y las «reglas financieras inequitativas» impuestas por «el orden global», Fernández afirmó: «No hay una teoría del derrame que haya funcionado. Es hora de que tomemos nota y actúa acorde». Un día antes, Biden había enfatizado que «la economía de derrames no funciona».
Así, las críticas en el discurso se combinaron con algunos guiños a Biden de cara a la reunión que sostendrán el próximo 25 de julio, para la que se plantearon los ejes principales: una agenda común con el medio ambiente en el centro; la posibilidad de promover inversiones en alimentos y energía y una propuesta específica para que la región vuelva a presidir el BID.
Ninguno de estos problemas está lejos de lo que señalaste. Biden en el discurso de apertura de la cumbre, el día anteriordonde anunció la creación de la Alianza para la Prosperidad Económica de las Américas, proyecto con el que se buscará reorganizar los organismos multilaterales de crédito para invertir en la región.
“Vamos a fortalecer nuestras cadenas de suministro para que sean más resilientes ante choques inesperados, promover la innovación en el sector público y privado, para que los gobiernos puedan enfrentar mejor los desafíos más apremiantes y las empresas puedan aumentar su productividad. Y vamos para atacar la crisis climática mediante el crecimiento de industrias relacionadas que crean empleos de alta calidad», había dicho Biden.
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Fuente: iprofesional.com