Cuando llega una administración, suele gastar casi tanta energía gestionando como hablar mal de lo que se ha hecho antes y abre el paraguas, como advirtiendo que todo hay que refundarlo y que, pase lo que pase, no la culpéis. En el enroque curioso y poco frecuente de entrenadores Eso que se dio entre Colón e Independiente eso no va a pasar.
Estrella dos técnicos muy respetados de nuestro medio que, además de una relación previa en la que el menor identifica al mayor como un entrenador y consejero, ambos llegan elogiando el trabajo que ha hecho el que se acaba de ir. La actitud es más generosa de lo que estamos acostumbrados a ver.
Domínguez no sabe qué autoridades tendrá el club dentro de dos meses o si encuentras fondos para derribar inhibiciones que te impiden traer refuerzo; así mismo, acepta el reto de ir a un gran sórdido y no deja de advertir que Independiente debería tener un carácter ofensivo, diferencia que habría sido el principal argumento para buscar un sucesor del Emperador. Y propone aprovechar el gran trabajo que hizo su antecesor con la juventud del club.
llega julio reconociendo que su ex alumno (debutó y lo dirigió en tres equipos) «hizo historia» en Santa Fe, y humildemente propone «intentar cumplir una función similar». En su discurso no ignora que ha pasado por Colón y se siente reconfortado de que le vuelvan a llamar.
Falcioni se convirtió en una especie de gran personaje del fútbol argentino, que con su trayectoria futbolística y su fortaleza para enfrentar los contratiempos de la vida está más allá del bien y del mal. Eso no significa que vaya a dar elogios; criticó las formas (no la decisión) de Rolfi Montenegro, por ejemplo.
POR colon e independiente llegan dos hombres agradecidos. Felicidades.
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Fuente: ole.com.ar/