El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha lanzado una nueva advertencia a su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, en medio de la intensificación de las operaciones de la Guardia Costera de Estados Unidos para interceptar petroleros en el Caribe. Esta acción forma parte de la estrategia de presión de Washington sobre Caracas.
Persecución a otro petrolero
En una conferencia de prensa acompañado por sus principales asesores de seguridad nacional, Trump expresó su disposición a intensificar la campaña de presión sobre el gobierno de Maduro. La Guardia Costera continuaba persiguiendo por segundo día a un petrolero sancionado, parte de una "flota clandestina" utilizada por Venezuela para evadir las sanciones impuestas por Estados Unidos. El buque, que navega bajo bandera falsa, enfrenta una orden judicial de incautación en Estados Unidos.
"Bloqueo"
Tras la incautación de un primer petrolero, Trump anunció un "bloqueo" a Venezuela y ha reiterado en varias ocasiones que los días de Maduro en el poder están contados. La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, ha afirmado que los operativos contra los barcos buscan enviar un mensaje de que la actividad ilegal de Maduro no puede continuar y que debe abandonar el poder.
La respuesta de Nicolás Maduro
En respuesta a las acciones de Estados Unidos, Maduro ha declarado que Trump debería enfocarse en los asuntos de su país en lugar de Venezuela. La tensión entre ambos líderes se ha intensificado, con Trump insistiendo en la salida de Maduro del poder y acusándolo de liderar el supuesto Cartel de los Soles, calificado como grupo "narcoterrorista".
Respaldo de Rusia
Ante el bloqueo naval estadounidense, Venezuela ha recibido el respaldo de Rusia. El canciller venezolano, Yván Gil, ha anunciado que Rusia expresó su solidaridad con el pueblo de Venezuela y con Maduro, ratificando su pleno respaldo frente a las hostilidades. Moscú ha manifestado su profunda preocupación por la escalada de acciones de Washington y reafirmado su total apoyo a Venezuela.
En medio de esta creciente tensión, Estados Unidos y Venezuela se encuentran en un enfrentamiento cada vez más intenso, con Trump advirtiendo a Maduro y este último recibiendo el respaldo de Rusia. La situación en el Caribe se vuelve más compleja a medida que las operaciones de la Guardia Costera continúan.
