hace más de 30 años, una cadena de restaurantes trató de capitalizar la fascinación de la gente con el mundo del cine y la televisión. Que ese amor por las estrellas no se limitaba solo a programas y revistas, sino que directamente podían codearse con esas celebridades mientras comían pollo frito. Con Bruce Willis, Sylvester Stallone y Arnold Schwarzenegger como socios, Planet Hollywood se convirtió en uno de los lugares del momento a principios de la década de 1990. Pero el impulso inicial se desvaneció, quebró dos veces y hoy su brillo es mucho más tenue.
En los años 70 nació Hard Rock Café en Londres con la idea de unir gastronomía, entretenimiento y música. Pronto se convirtió en una marca en sí misma y explotó esta veta a través del merchandising. Bryan Kestner trabajaba en la productora Taft-Barish en 1987 cuando se le ocurrió proponer una aventura a su jefe, el productor de cine Keith Barish. La premisa: abrir un Hollywood Hard Rock Café y llevar esta mística a todas partes del mundo.
A Barish le gustó el concepto y se reunió con varios empresarios del rubro gastronómico. Uno de ellos fue el británico. robert condeque se había hecho conocido por su cadena de restaurantes de temática medieval y en ese momento era director ejecutivo de Hard Rock International. «Le dije No iba a hacerlo a menos que tuviéramos celebridades como socios. para hacer marketing», recuerda Earl, hablando con Esquire en 2021.
equipo soñado de estrellas
El primero en unirse al proyecto fue el propio Terminator. Arnold Schwarzenegger ya había alcanzado la fama tocando el T-800 y estaba filmando la secuela. Luego fue el turno de Bruce Willis y más tarde llegó Sylvester Stallonequien, a diferencia de los otros dos, pidió personalmente convertirse en inversor.
Planet Hollywood fue pensado como un museo para la industria del entretenimiento que también vendía comida. Por eso fueron a los estudios de cine que prestaron accesorios de varias películasaunque también encontraron algunas gemas en subastas y ventas de garaje.
Las paredes estaban decoradas con todo, desde la icónica chaqueta de cuero de Terminator hasta el hacha que usa el personaje de Jack Nicholson para aterrorizar a su familia en El resplandor.
noche de estreno
los gran inauguración se llevó a cabo en octubre de 1991 en Manhattan. El restaurante estaba ubicado en la calle 57 y demandó más de US$8 millones en inversión. Stallone, Willis y Schwarzenegger asistieron a todos los programas de televisión en las semanas anteriores para promocionarlo, y también regalaron camisetas, monos y batas a varias celebridades para comenzar a crear conciencia sobre la marca.
George Clooney, Donald Trump y Elton John fueron algunos de los muchos invitados al debut. «Es como los Oscar, pero mejor», aseguró Oprah Winfrey. En 1993, Demi Moore se unió como accionista y la empresa abrió su segunda ubicación, esta vez en Minneapolis. Luego siguieron aperturas en Moscú, París y Las Vegas.
vino la crisis
En abril de 1996 Planet Hollywood salió a bolsa y recaudó más de 725 millones de dólaresSin embargo, este será el comienzo de su crisis. «Fue un mal año y un error. Eso ejerció una presión innecesaria sobre la compañía para crecer cada trimestre», dijo Barish.
A esto se sumó que otras celebridades comenzaron a abrir sus locales temáticos, no solo del mundo del cine sino también del deporte. La competencia creció y al mismo tiempo las luces de las estrellas se desvanecieron.
Al principio era común ver a actores de la lista A cenando o tomando una copa en Planet Hollywood. Poco a poco se convirtió en un atractivo turístico y las celebridades dejaron de aparecer o si lo hacían era cada vez con menos frecuencia. Barish dejó la empresa en 1999 y unos meses después la empresa se declaró en quiebra. Cerró varias nueve de sus tiendas en Estados Unidos y ocho de las que tenía distribuidas por todo el mundo.
planeta hollywood hoy
En 2000 Schwarzenegger vendió sus acciones y un año después Planet Hollywood volvió a declararse en quiebra. Earl tuvo la idea de diversificar el negocio y extenderlo a otros ámbitos, como el alojamiento y los juegos de azar. Así fue que en 2007 abrió un casino resort en Las Vegas.
A día de hoy la marca sigue en pie, aunque Stallone ya no forma parte del equipo inversor y Willis no volvió a mencionarlo. Según su sitio web tiene restaurantes en Orlando, Los Ángeles, Las Vegas, París, Malta y Qatar.
Mientras tanto, el negocio de casinos y hoteles siguió creciendo. Abrieron en Cancún, Costa Rica e India. Antes de la pandemia habían anunciado la creación de una marca de lujo ph Premier que tendría un cono-hotel de 547 habitaciones en Florida.
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Fuente: cronista.com