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Pfizer sali de la pandemia convertido en el ms visible productor de medicamentos del mundo, con ganancias por la vacuna para el coronavirus que en un solo ao casi duplicaron los ingresos. Ahora la inyeccin, sumada a la pastilla antiviral para el Covid-19, se encamina a aportar ms de la mitad de las ventas por US$ 100.000 millones que registrar en 2022. Eso deja a la compaa con una masa de efectivo de US$ 28.000 millones y un gran problema: cmo pasar al segundo acto.
La presin est claramente sobre Pfizer para demostrar que los msculos que desarroll durante la pandemia no se atrofiarn. Las grandes farmacuticas no duplican su facturacin con tanta velocidad, y nadie presume que habr de continuar esa clase de crecimiento. Pero algo est claro: Pfizer no puede volver al camino lento que sigui por aos, cuando creci en gran medida gracias a la compra de otras firmas con mejores proyectos de medicamentos que los que poda descubrir por su cuenta. Sus acciones ya cayeron un 25 por ciento en 2022 ante el temor de la vuelta a esa poca en que iba detrs del mercado general y de otros productores de drogas.
«Pfizer era aburrida antes del Covid», afirma Evan David Seigerman, analista de BMO Capital Markets. «Ahora la castigan porque, o bien los inversores no le ven futuro al Covid o no llegan a precisar ese futuro».
Antes de la pandemia, Pfizer haba pasado algunos aos sin lanzar un xito rotundo, y varios de sus productos actuales pronto afrontarn la competencia de los genricos. Pero un problema que antao habran resuelto mediante compras ahora exige una estrategia diferente. Las megaoperaciones con las que los directivos de Pfizer solan impulsar el crecimiento se volvieron ms costosas y difciles de concertar, debido a la suba de las tasas de inters y el refuerzo en Washington de la vigilancia antimonoplica.
Acostumbrada a lo grande
Ese es un problema para una compaa que se acostumbr a transacciones de tal magnitud que casi ninguna otra farmacutica poda lograr. Cuando Pfizer pag US$ 90.000 millones en el ao 2000 por Warner-Lambert, uno de los activos que embols fue la exitosa Lipitor contra el colesterol, que en su momento de apogeo generaba ventas anuales por US$ 13.000 millones. Buscando otros xitos, los sucesivos directores ejecutivos de la compaa gastaron unos US$ 200.000 millones en distintas operaciones entre 2000 y 2020, indican datos compilados por Bloomberg.
Antes incluso de que el Covid enfermara siquiera a una persona en Wuhan, China, Albert Bourla, el CEO de Pfizer, ya estaba embarcado en una senda que hara de la compaa una farmacutica muy diferente.
Bourla, quien ascendi desde rangos menores y asumi el cargo mximo a comienzos de 2019, vio la oportunidad de transformar a Pfizer en una versin del tipo de compaa de biotecnologa innovadora y gil que la firma sola adquirir. Separ una gran divisin que inclua productos legendarios pero sin patente como el Lipitor y el Viagra, y anunci su intencin de concentrarse en sectores de alto riesgo y alta remuneracin, como el cncer y las enfermedades poco comunes.
Ahora, dos aos despus del desvo por el Covid que hizo a un lado todo lo dems, Bourla est listo para avanzar, a pesar de que Wall Street sigue concentrado en los US$ 37.000 millones que Pfizer sum el ao pasado gracias a la vacuna.
«Nadie me pregunt cmo andan los otros productos aparte del Covid», dijo un Bourla algo exasperado durante una comunicacin con analistas en el pasado verano boreal. Su compromiso es lograr un crecimiento anual de los ingresos del 6 por ciento en el negocio base -que excluye los productos por el Covid- hasta 2025. Analistas de Wall Street consideran que lo ms probable es que esa cifra se ubique en el 5 por ciento.
No hay forma de que Pfizer pueda recrear las condiciones que llevaron a este momento. Los gobiernos volcaron miles de millones de dlares para acelerar el desarrollo de vacunas Covid. (Pfizer no recibi dinero, pero su socio, BioNTech SE, obtuvo US$ 445 millones de Alemania). Los reguladores habilitaron vas ms rpidas para dar autorizaciones, y el gobierno estadounidense encarg pedidos por miles de millones de dlares e invoc una legislacin de la poca de la guerra fra para apurar la produccin. Nada de eso podr repetirse pronto.
Mientras tanto, el Covid desat una ola de inversiones en la tecnologa de ARN mensajero, que ayuda a ensear a las clulas a producir protenas que activan la respuesta inmune en nuestros cuerpos y es la ciencia detrs de las vacunas para el coronavirus de Pfizer y Moderna. Ahora Pfizer, BioNTech y Moderna afrontan una legin de colegas advenedizos o de la vieja escuela vidos por facturar con drogas propias que usan el ARNm. Esto implica una batalla por recursos, talentos y nuevos tratamientos prometedores.
El mensajero
Para gran parte del mundo la tecnologa con la que Pfizer produjo la vacuna Covid pareci salir de la nada. En realidad deriva de decenios de investigacin. Por aos los acadmicos probaron y fracasaron en su intento de entender cmo llevar las frgiles molculas sintticas de ARNm adonde tenan que ir. A pesar de los avances en los aos 90 y comienzos de los 2000, ningn producto con tecnologa de ARNm haba ingresado en ensayos avanzados antes del Covid.
Construir a partir del xito de esa vacuna es una parte central de la visin que tiene Bourla de Pfizer. El ejecutivo declar su pleno respaldo a la ARNm y se refiri a los abundantes usos potenciales de la tecnologa, desde una vacuna antigripal -que podra llegar al mercado el ao prximo- a tratamientos para el cncer, curas de raras enfermedades genticas y una dosis para la culebrilla. La compaa ya puso a trabajar a parte de su capital forjando alianzas con pequeas firmas especializadas. Sin embargo, el xito podra tardar aos y muchos rivales, como Moderna, tambin trabajan en ARNm.
«Cuando Pfizer vaya en pos de las terapias ARNm, tendr xitos potencialmente grandes pero tambin ms incertidumbre», seala Damien Conover, analista en Morningstar. «Cada vez que te alejes un poco de las enfermedades contagiosas -el uso que se les da hoy-, te alejars de la manera en que funciona la tecnologa».
Pfizer quiere llevar mltiples productos con ARNm al mercado en los prximos cinco aos, una meta ambiciosa. Las terapias suelen tardar ms de una dcada en salir del laboratorio a las pruebas con humanos que determinarn la aprobacin de los reguladores. Y alrededor del 90 por ciento de los proyectos de drogas fracasan en los ensayos clnicos.
Eso no quiere decir que laboratorios por todo los Estados Unidos no hagan el intento, y se disputen a los cientficos. «Estn bombardeando a estudiantes y becarios», dice Daniel Anderson, profesor de ingeniera qumica en el Instituto Tecnolgico de Massachusetts, quien afirma que muchos de sus alumnos abandonaron las aulas para lanzar firmas propias o sumarse a las farmacuticas.
Unas 43 compaas privadas que trabajan con tecnologa ARNm recaudaron financiamiento por US$ 1600 millones en los ltimos 12 meses, seala PitchBook Data. Despus estn los gigantes que cotizan en Bolsa, como Moderna o BioNTech, los pioneros en el sector.
Para competir con ellos, Pfizer entroniz a sus propios expertos en ARNm, como Kathy Fernando, una directiva farmacutica de 44 aos que empez su carrera estudiando la tecnologa. En 2006 dedic su tesis doctoral al desarrollo de una vacuna de ARNm para el HIV. En 2014 se incorpor a Pfizer.
Durante la pandemia, Fernando fue designada al frente de las operaciones de investigacin y desarrollo y estrategia cientfica con ARNm de Pfizer. «No apuntamos a ser la compaa con la mayor cantidad de programas de ARNm en nuestra cartera, somos ms selectivos», aclar.
Fernando divide el tema en tres partes: evaluacin de la tecnologa, biologa y produccin. «Las partes dos y tres -biologa y produccin- son lo que nos diferencia», apunta. Es un indicio de que Pfizer podra no ser la lder de la tecnologa, pero podra llevar con xito un producto al mercado. Al 4 de septiembre, Pfizer haba despachado 3.700 millones de dosis de su vacuna Covid a 180 pases.
A 40 kilmetros al norte de su sede en la ciudad de Nueva York, Pfizer gasta casi US$ 500 millones para remozar el predio de investigacin y desarrollo de vacunas de Pearl River, un lugar de 133 hectreas que alberga laboratorios de tecnologa avanzada y a unos 1000 empleados que fueron claves en el desarrollo de la inyeccin para el Covid.
Pfizer tambin apel a asesores externos en ARNm para poner a prueba su estrategia y sus productos. Drew Weissman, profesor de investigacin en vacunas de la Universidad de Pennsylvania al que se le atribuye el desarrollo de la tecnologa ARNm empleada en las vacunas Covid, figura entre los que han sido contactados en busca de orientacin. Weissman cuenta que Pfizer rene «hasta 30 personas y las pone a discutir ideas en encuentros que duran uno o dos das».
Alta competencia
Los rivales de Pfizer estn haciendo movimientos similares, y posan la mirada ms all del ARNm en otras medicinas de ARN o ADN. El gigante de los medicamentos Eli Lilly & Co est incorporando talentos y rastrea ese tipo de operaciones, a la vez que construye una instalacin por US$ 700 millones en Boston, el mayor nodo de biotecnologa de Estados Unidos. Dan Sovronsky, director mdico y cientfico de Lilly, advierte que ninguna compaa por s sola podr dominar el sector.
«Empieza con un puado de jugadores, pero la tecnologa la adoptan todos y con el tiempo se convierte en uno de los pilares en la produccin de drogas», explica.
Despus est Moderna, que se negocia con el acrnimo accionario de MRNA. Su CEO, Stphane Bancel, es escptico respecto de que Pfizer pueda transformarse en un bastin de la innovacin con ARNm. «Dganme una industria en la que el cambio lo produjo uno de los grandes», coment en septiembre durante una entrevista en el da R&D de Moderna. «Pfizer hizo una tarea asombrosa llevando el producto a la escala de desarrollo y produccin. Nosotros hicimos lo mismo sin ayuda de una compaa de las Big Pharma«.
Hay dudas respecto de cun lejos podr llegar Pfizer con el ARNm sin acudir al socio que colabor en el desarrollo de la vacuna. «Pfizer es hoy el productor ms grande de vacunas ARN del mundo -acota Weissman-. Pero el conocimiento de la plataforma les vino de BioNTech«.
Bourla trat de cambiar la imagen de que Pfizer depende de BioNTech para hacer avanzar la estrategia con ARNm. «No tenemos que trabajar con ellos», dijo en una entrevista a comienzos de 2021 en la que se refiri a la «fantstica asociacin» que no impedira que la compaa siguiera su propio rumbo.
De momento Pfizer gast unos US$ 2000 millones en proyectos de ARNm, una insignificancia comparada con la montaa de efectivo que acumul. La compaa tiene la capacidad de gastar hasta US$ 150.000 millones en transacciones hacia el fin de este ao, escribi Seigerman en una comunicacin. Pero el panorama cambi significativamente desde entonces, ya que las tasas de inters se dispararon y la inflacin espant a los mercados de crdito.
Directivos de Pfizer esperan cerrar las suficientes transacciones para incorporar unos US$ 25.000 millones en ventas hacia 2030. Pero lo tendrn que hacer sin llamar demasiado la atencin de los funcionarios antimonoplicos en Washington.
Unas 43 compaas privadas que trabajan con tecnologa ARNm recaudaron financiamiento por US$ 1600 millones en los ltimos 12 meses, seala PitchBook Data.
Si bien Pfizer est concentrada en el ARNm, tambin avanza en otros sectores. Sus candidatos ms prometedores a convertirse en medicinas incluyen una vacuna para el virus sincitial respiratorio (VSR), que cada ao hospitaliza o mata a unos 100.000 adultos mayores en los Estados Unidos, adems de terapias para la obesidad y la diabetes, y tratamientos para el…
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Fuente: cronista.com