Aplausos y sonrisas en el Palacio del Elíseo donde Francia y Alemania han celebrado una cumbre bilateral con motivo del 60 aniversario del Tratado de Amistad que lleva el mismo nombre que el edificio.
Es la imagen con la que parecen dar carpetazo a un año de roces y una semana de tensiones en torno al envío de tanques a Ucrania y que ha acabado con ambos dando evasivas respecto al envío de los Leopardos o los Leclercs.
Al menos según el ministro alemán de Asuntos Exteriores, ha terminado con la concesión del permiso a Polonia para enviar los Leopardos alemanes. El ministro de Asuntos Exteriores y el presidente francés hablaron repetidamente de su «amistad».
Presentaron la extensión a Alemania del proyecto franco-portugués-español del hidroducto H2MED.
Ellos definieron un «línea común» a favor de una respuesta ambiciosa y rápida a los subsidios estadounidenses en el campo de la transición energética y acordaron promover el transporte ferroviario gratuito para los jóvenes de ambos países con boletos binacionales gratuitos.
Sin embargo, pese a reiterar reiteradamente las convergencias entre ambos, no ocultaron sus diferencias en cuanto al origen de la tecnología que tendría que formar parte del escudo antimisiles europeo.
Berlín quiere implantar el escudo antimisiles con las tecnologías estadounidenses e israelíes existentes, mientras que París aboga por una solución europea, basada en un sistema franco-italiano.
El presidente francés dijo que esperaba trabajar «en las próximas semanas» con Alemania y Polonia en particular para tratar de desarrollar un «estrategia común» Y «avanzar hacia la máxima soberanía tecnológica e industrial» en esta cuestión.
Alemania se une a la interconexión H2Med
“Hemos decidido extender ‘H2Med’, que gracias a fondos europeos une Portugal, España y Francia, a Alemania, que será socio en la infraestructura de este proyecto”dijo Macron en el acto que culminó la Cumbre franco-alemana que buscaba dejar de lado las tensiones entre París y Berlín en 2022.
Macron ha señalado, en una comparecencia conjunta con el canciller alemán Olaf Scholz, al término de la cumbre, que existe «una voluntad» de impulsar el hidrógeno verde a nivel europeo.
En cierto sentido, el presidente francés recordó que este proyecto es más viable que el MidCat, el plan que en un principio defendieron España y Portugal para el transporte de gas.
“El MidCat no era la buena estrategia, que era transportar gas y que cruzaba los Pirineos, ahora es la buena estrategia, que pasa por el Mediterráneo”Yo considero.
Scholz, quien en un momento apoyó a MidCat y durante algunos años trató de «convencer» Macron para completarlo, ahora consideraba que el hidroducto «Es un buen proyecto de futuro» y valoró también su «buen fondeadero europeo», por reunir a sus socios españoles y portugueses, además de los franceses.
Francia, España y Portugal habían acordado en la cumbre euromediterránea de Alicante, el pasado 9 de diciembre, la construcción de este hidroducto submarino entre Barcelona y Marsella.
Este acuerdo permitirá el transporte de hidrógeno verde por toda Europa en un contexto de búsqueda de alternativas a las fuentes de energía contaminantes, en momentos de crisis por la guerra en Ucrania.
El proyecto incluye dos infraestructuras transfronterizas, una entre Celorico da Beira (Portugal) y Zamora, y otra submarina, entre Barcelona y Marsella, así como dos ejes troncales.
El macroproyecto, que será financiado hasta en un 50% por fondos europeos, permitirá traer hidrógeno obtenido a partir de energías renovables a la UE.
En un comunicado, el gobierno español también anunció que Alemania se sumará al proyecto y dijo que “H2Med estará operativo en 2030 y se espera que sea capaz de transportar 2 millones de toneladas de hidrógeno verde al año desde España, lo que supondrá el 10% del total consumido por la UE”.
“En 2050 se estima que el 20% de toda la energía en Europa será hidrógeno renovable”indicó el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de España.