Ocurre en los barrios más afectados por los recortes. Algunos consorcios lo debaten y otros directamente se ahorcan.
La desesperación por el cortes de energía empujó a muchos vecinos de los barrios más golpeados por la falta de energía a buscar soluciones ilegales para proporcionar electricidad. En las últimas semanas, con la ola de calor récord, la interrupción del suministro eléctrico ya se ha hecho insoportable y varios consorcios y familias debaten si se cuelgan de la red eléctrica para tener luz.
“Llevamos años sufriendo esto. Hemos denunciado miles de veces y no hacen nada. Incluso iniciamos procesos judiciales. Nos sentimos abandonados”, dijo Daniela, vecina de Mataderos, zona donde vive la gente. con la incertidumbre constante de tener luz o no.
Este escenario catastrófico hace que muchos propietarios e inquilinos comiencen a colgarse de la red haciendo un «puente». «En el edificio de mi mamá, el consorcio está debatiendo si llamar a un electricista y conectarse directamente a la red», comentó su hija Laura.
El problema es que estos «puentes» Son peligrosos e ilegales. “Hacen una conexión entre la casa y una de las tres fases que están en el circuito eléctrico. Mandan un cable desde la térmica de la propiedad hasta la caja de salida de la calle, «pasando por alto» el medidor, comenta Javier Fernández, técnico electricista y subsecretario de la Asociación Argentina de Instaladores Eléctricos Domiciliarios, Industriales y Comerciales.
Fernández explica que esto es peligroso porque sobrecargar las fases. “Si se conectan varios vecinos a una fase, esto hace que baje el voltaje, lo que puede quemar el cable. De esta manera, la luz se vuelve a apagar y la empresa tiene que ir al lugar y cambiar el cable».
Además, advierte que es ilegal. «La energía es privada. Los cables que pasan por la calle son de la compañía eléctrica. Es un delito ahorcar o puentear. Esto se llama robo de energía. Y está penado por la ley”.
Lucas, otro electricista, reconoció que había varias llamadas de vecinos consultando sobre este tema. «Te llaman y te piden presupuesto para hacerlo. Lo único que puedo hacer es ir a la caja y ver qué está pasando. Pero no hagas puentes. Es ilegal. Pero es cierto que en estas semanas han aumentado las consultas para hacer este tipo de trabajos».
Por lo que pudo averiguar Clarínlos electricistas que proporcionan esta solución, están cargando entre 3.500 y 5.000 pesos para hacer la conexión en paralelo.
Respuesta de Edesur
Clarín consultó a la compañía de energía sobre el asunto. “No es conveniente que los usuarios ni los electricistas toquen la red de distribución”, respondieron. «Esto representa un riesgo para quien lo hace. Puede pasar que con el objetivo de cambiar de fase se desestabilice la red y a la larga la solución termine siendo un problema para quien lo hace y sus vecinos”, aseguró.
“Son trabajos que están dentro del ilegalidad y obviamente no hay certeza de que estén bien hechos. Intervenir en la red de distribución eléctrica representa un riesgo para quien lo hace y para terceros. No es conveniente hacerlo”, agregaron.
ley de los electrodependientes
Fernández explica que la ley de electrodependiente obliga a las empresas de energía a suministrar generadores a las personas que estén registradas como tales. “Son personas que necesitan energía para sobrevivir. Un claro ejemplo son las personas insulinodependientes, que necesitan guardar sus medicamentos en la heladera. En estos casos, si hay un corte de luz, la empresa está obligada a proporcionar un generador y avisar de antemano cuando se va a hacer el corte para que la persona pueda conectarse antes al equipo».
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Fuente: Titulares.com