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Inglaterra tumba con polémica a Dinamarca y oposita a campeón de la Eurocopa (2-1) – España

Wembley necesitaba una noche como esta para poner a Inglaterra en el mapa. Un equipo que parece predestinado a ganar la Eurocopa, decidido a ganar cada vez que juega en casa. Levantó el Mundial de 1966 y ahora se opone a la Eurocopa. El primer paso ya está dado. Eliminó a una más que digna Dinamarca en la prórroga, sentenciada por un gol de Kane. El delantero falló un penalti pero Schmeichel no pudo con el segundo disparo, definitivo para firmar la final (2-1).


Protegida por sus compatriotas, Inglaterra se siente intocable. No se mareó ni siquiera cuando llegó a las primeras curvas ante una Dinamarca que se ha ganado el respeto y el cariño de toda Europa, resistente a todo. A menudo, la narrativa de un partido va en una dirección y el fútbol está obsesionado con ir en la otra dirección. El equipo de Southgate acarició el 1-0 varias veces pero una falta en el borde del área local anticipó la sorpresa: el disparo de Damsgaard dibujó una parábola imposible para Pickford.

Dinamarca quería recordarle a Inglaterra todos sus miedos. Fue entonces el turno de examinar cuánto ha madurado desde el Mundial de Rusia, acostumbrada al fiasco cuando tiene que rendir cuentas a sí misma. Wembley respaldó al equipo tan desesperado por que alguien lo empujara desde las gradas. La respuesta fue inmediata. De nuevo puntual a la cita, Sterling obstaculizó a Kjaer para que el central danés barriera contra su puerta el pase mortal de Saka: 1-1.

Inglaterra se recuperó de todos sus males. La eliminatoria alivió a más de uno, asustado con el panorama con el que arrancaron las semifinales. No fue justo para Inglaterra, más decidida que Dinamarca en todo momento. Ocurre que el cuadro de Hjulmand atrapó a uno sobre la marcha y el cuadro de Southgate sufrió mucho más, condicionado por sus propias circunstancias. Jugar en casa ayuda pero también intimida, más presionado para no perder una oportunidad como esta.


La segunda mitad se correspondió mucho más con el choque imaginado. Inglaterra encerró a Dinamarca, atrincherada contra su voluntad. No tuvo más remedio que aceptar que no iba a disfrutar en Wembley sino a sufrir. Estaba preparada para tal escenario, experimentada con golpes. Ninguno tan duro como el de Eriksen, recordado en el preludio del partido. En el campo el equipo no dejó que Inglaterra se apagara, siempre predispuesta a un esfuerzo más.


Buscando repetir la hazaña de su padre, Schmeichel se apoyó en el apoyo de Dinamarca: sacó el escudo para negarle un disparo a Sterling a quemarropa y tras el descanso contraatacó un cabezazo de Maguire. Grealish apareció en la recta final, actor de reparto en Inglaterra, nominada al Oscar. Con Dinamarca cansada, no había mejor recompensa que la prórroga. Nada que ver con Inglaterra, que por mucho que trató de salvarse el añadido, no se libró de media hora más.

Schmeichel repelió el disparo cruzado de Kane. Fue un acoso y derribo de Inglaterra. Grealish y Sterling también pusieron a prueba a la indestructible Dinamarca, un equipo imposible de olvidar. Aunque esta vez no se iba a escapar a Inglaterra, premiada con un penalti por un derribo dudoso de Sterling, que sacó futbolistas y otro balón que se introdujo en el campo: Schmeichel escupió el disparo de Kane, pero en el rebote el delantero firmó el pase. a la final de la Eurocopa.

Inglaterra, 2

Pickford; Walker, Stones, Maguire, Shaw; Rice (Henderson, 95 ‘), Phillips; Saka (Grealish, 69 ‘, Trippier, 105’), Sterling, Mount (Foden, 95 ‘); Kane

Entrenador: Gareth Southgate

Dinamarca, 1

Schmeichel; Larsen (Wass, 66 ‘), Christensen (Andersen, 79’), Kjaer, Vestergaard (Wind, 104 ‘), Maehle; Hojbjerg, Delaney (Jensen, 88 ‘); Braithwaite, Damsgaard (Poulsen, 66 ‘), Dolbert (Norgaard, 66’)

Entrenador: Kasper Hjulmand

Goles: 0-1, Damsgaard (30 ‘), 1-1, Kjaer (39’), 2-1, Kane (104 ‘)

Árbitro: Danny Makkelie. Amonestó a Maguire (49 ‘), Wass (72’)

Fuente: mundodeportivo.com

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