“No quería que le dijéramos todo el descontento que tenemos, todas las mujeres que faltan en San Luis”, dijo a los medios de comunicación de la Escola Rivadavia, donde votó Alberto Rodríguez Saá.
Desde la llegada del gobernador hasta su salida, hubo un fuerte operativo policial y las mujeres no pudieron acercarse a ellos para presentar una denuncia. “Somos 10 mujeres que venimos pacíficamente y no nos dejamos expresar, es una pena que esto pase en una democracia. Vinimos a bailar, a hacer una intervención y a leer un texto, que es lo que hacemos siempre que nos reunimos para que nos llegue nuestro mensaje. No queremos violencia ”, dijeron. “Nos registraron, custodiaron y amenazaron diciendo que nos iban a meter en la cárcel”, denunciaron.
Cuando Rodríguez Saá subió al auto, le gritaron: “¿Dónde está Guadalupe? La queremos viva ”. Uno de los carteles que portaban y que no pudieron mostrar al líder provincial decía: «Nuestros deseos no caben en tu urna». “Durará 3 meses y no sabemos nada de una niña de 5 años que se perdió jugando en un barrio. El estado es responsable de investigarlo y encontrarlo. Queremos saber qué le pasó ”, destacaron. A las personas desaparecidas que tiene San Luis, agregaron las incógnitas en torno a los casos de Abel Ortiz y Lucas Bolotti, que quedan impunes.
También recordaron a otras tres víctimas en espera de justicia: Magalí Morales, Laura Godoy y Yohana Galdeano, víctimas de feminicidio. “No puede ser que el sindicalista Juan Carlos Solalinde esté protegido, para que pase por una emoción violenta”, reprocharon.
Fuente: El Chorrillero y video de Cristina Sosa
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