Tenían un gesto que apenas se ve. Invitaron a tomar café a la policía que custodiaba la cuadra y la dejaron ir al baño. Ella correspondió a su generosidad de la manera más cruel: le robó los ahorros de toda su vida y Le disparó a cada uno de ellos en la nuca. Con el dinero, unos 80.000 dólares, el agente quiso pagar el viaje de su hija a Disney hasta que cumpliera los 15 años.
El doble delito de matrimonio de jubilados del Parque Avellaneda ocurrió el 11 de junio de 2019. Las víctimas fueron Antonio Chirico (71) y María Delia Esperanza (63). La pareja ha vivido en una casa ubicada en Eugenio Garzón 3581, desde que se casaron.
El acusado es Sonia Rebeca Soloaga (36), quien en ese momento era oficial de la Policía Municipal y tenía programado un viaje a Disney para su hija que cumplía 15 años.
Poco después de dos años del doble delito, el juicio oral comienza el 12 de mayo. La mujer llega al debate bajo custodia. Su ex novio Diego Alberto Pachilla (37), quien también formó parte de la fuerza policial, será juzgado por disimulo, pero llega a la audiencia en libertad.
«Arruinó la vida de toda la familia», dijo. Clarín Mariano Chirico (40), uno de los hijos de la pareja asesinada. «Estamos a la espera de que se haga justicia, aunque sería justo que no hubiera sucedido», agregó.
El juicio será por videoconferencia y tendrá una duración de tres audiencias los días 12, 19 y 21 de mayo. Será responsable del Juzgado Oral Penal (TOC) No. 7 de la Capital Federal, integrado por los jueces Gabriel Vega, Gustavo Rofrano y Alejandro Noceti Achaval. El promotor será Oscar Ciruzzi.
Alberto Antonio Chirico (71) y María Delia Esperanza (63), la pareja asesinada en su casa de Parque Avellaneda.
El hombre, arquitecto de profesión, vivía en la misma propiedad que sus padres y tuvo que mudarse debido a la angustia que le provocó la situación.
La acusación contra Soloaga es «hurto calificado por haber sido cometido con arma de fuego en enfrentamiento real con homicidio criminis causa, reiterado en dos ocasiones, cometido con arma de fuego y traición y acusación falsa». Por esta combinación de crímenes será condenado a cadena perpetua, si es declarado culpable. Su novio será responsable del delito de «doble encubrimiento agravado».
El dúo policial trabajaba en la comisaría del 9C, fuerza de la que fueron destituidos en cuanto fueron denunciados en este proceso.
En su solicitud de llevar el caso a juicio, la fiscal que investigó el caso, Estela Andrades, consideró probado que el hecho ocurrió el 11 de junio de 2019, entre las 12 del mediodía y las 2:30 de la tarde, cuando Soloaga ingresó a la casa por la Rua Garzón. «Aprovechando la relación que había logrado establecer» con el matrimonio.
Porque esa dirección estaba cerca de la parada donde, durante meses, la policía prestó sus servicios en la calle, y Chirico Permitió que la policía usara el baño y solía servirle café y comidas.
“Mi madre era de Rauch -una ciudad del interior de Buenos Aires con 11 mil habitantes-, gente del campo, gente mayor. Aunque no eran viejos, tenían otros códigos. Ahora la sociedad sospecha más de los que no saben «, dijo el hijo del matrimonio a Clarín.
María Delia Esperanza (63) y Alberto Antonio Chirico (71), la pareja asesinada en su casa de Parque Avellaneda.
«Ellos ayudaron a los necesitados. Por eso la dejaron pasar», dijo Chirico, explicando que vio a Soloaga solo una vez cuando salía de la casa y que estaba impresionado por «sus ojos saltones».
El fiscal Andrades argumentó que Soloaga «ideó un plan para entrar a la casa y apoderarse del dinero -entre 70.000 y 80.000 dólares en moneda extranjera y pesos-, perteneciente a los llamados Speranza y Chirico, ejerciendo violencia sobre ellos y utilizando un arma de fuego, luego de lo cual mató a los designados con traición, y para garantizar su impunidad. «
El fiscal afirmó que las víctimas «fueron severamente golpeadas en la cabeza (con colillas), lo que le permitió obtener el dinero en cuestión, que estaba escondido en diferentes sectores de la casa», entre ellos «una caja de leche de la marca ‘Verónica’. , una caja de ‘Almidón de Maíz’ ubicada en el armario, un pico de plástico con dos tapas y una caja de zapatillas ”.
Según el fiscal, la boda fue ejecutada por Soloaga con un disparo en la cabeza cada uno, «aplicado desde atrás mientras estaban indefensos boca abajo», para lo que utilizó una almohada burdeos como silenciador.
La clave para vincular Soloaga con el doble crimen estaba en una denuncia que hizo el propio imputado Aquella tarde del 11 de junio en la comisaría 7A, donde denunció que le habían robado 300.000 pesos y su arma reglamentaria al pasar por Flores, camino a realizar un depósito para pagar el viaje del cumpleaños número 15 de su hija.
Los investigadores quedaron impresionados de que el mismo oficial de policía que custodiaba el bloque de bodas y los conocía informara que fue agredida, que disparó dos tiros, la misma cantidad de cápsulas de 9 mm recolectadas en el lugar, y que había sido robado. la pistola y 300.000 pesos en efectivo.
El doble crimen ocurrió en una casa de Garzón al 3500, en el Parque Avellaneda. Foto Marcelo Carroll
Además, al inspeccionar su automóvil, la policía encontró 70,850 pesos almacenados en su chaqueta.
Según Andrades, se trató de una denuncia falsa «para encubrir sus acciones y, en particular, para deshacerse de la pistola que se utilizó en la práctica del delito».
Pero la propia Soloaga, al ampliar su testimonio investigativo, confesó que el asalto fue una mentira y dijo que en realidad la pistola y los 300.000 pesos que había perdido al ir al baño de una gasolinera, lo que para el fiscal es «poco creíble».
Para Andrades, el posible motivo del doble crimen fue la deuda que Soloaga tuvo que pagar para pagar el viaje de 15 años a Disney que su hija adolescente realizaría el 14 de julio de ese año.
La empresa «Fun Time» informó que a la fecha de los eventos, Soloaga debía la suma de $ 6.021 (276.000 pesos a esa fecha).
El fiscal Andrades argumentó que «no es nada creíble» que Soloaga lograra ahorrar ese dinero con sus horas adicionales «ya que está comprobado que en dos años recibió 109.728, es decir, menos de la mitad del total adeudado».
La pareja también tuvo otra hija que quedó «muy conmocionada» por el doble crimen. “Siempre piensas que estas cosas les pasan a los demás, pero les pasa. Y te cambian la vida ”, dijo Chirico.
GL