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La unidad de delitos financieros de Francia dijo el martes que había acusado a la prominente derechista Rachida Dati, exministra del gabinete y aliada cercana del ex presidente Nicolas Sarkozy, por sus tratos con el exjefe de Renault deshonrado Carlos Ghosn.
Está acusada tanto de «corrupción pasiva por parte de una persona con un mandato electivo» como de «beneficiarse del abuso de poder» en relación con el trabajo de consultoría que realizó para Ghosn de 2010 a 2012, cuando también fue diputada en el Parlamento Europeo.
Según una fuente cercana a la investigación, Dati recibió 900.000 euros ($ 1.06 millones) en honorarios de abogados durante ese período.
La investigación busca determinar si esto fue puramente por trabajo legal o si realmente participó en actividades de cabildeo, lo que sería ilegal para los legisladores europeos.
Según el periódico Le Monde, el contrato de Dati la comprometía a ayudar con la expansión internacional de Renault, especialmente en Oriente Medio y el norte de África. Dati pidió que el trabajo se mantenga estrictamente confidencial, dijo Le Monde.
Dati, quien ahora es alcalde del séptimo distrito de París por el partido derechista Los Republicanos (LR) y a veces considerado como un futuro candidato presidencial, se desempeñó como ministro de Justicia en el gobierno de Sarkozy entre 2007 y 2009 y también fue su portavoz de campaña electoral.
Desde el verano de 2019, tres jueces habían estado investigando los contratos acordados por la filial holandesa de Renault Nissan cuando Ghosn era director ejecutivo del grupo.
Dati fue interrogado en el caso durante 16 horas en noviembre, pero no se le acusó formalmente, sino que se le otorgó la condición de testigo asistido.
A principios de este mes, sin embargo, los magistrados investigadores la interrogaron nuevamente y presentaron los cargos.
Ghosn buscado por Interpol
Los abogados de Dati, Olivier Baratelli, Olivier Pardo y Francis Teitgen, declinaron hacer comentarios cuando fueron contactados por AFP.
Sin embargo, su equipo de defensa había argumentado anteriormente que ninguno de los ingresos de Dati se había mantenido en secreto y que debería aplicarse un plazo de prescripción de tres años.
Los magistrados de la unidad de delitos financieros no estuvieron de acuerdo y continuaron con su caso que había sido provocado por una denuncia legal de un accionista de Renault.
Ghosn, quien durante años tuvo una excelente reputación como un alto ejecutivo automotriz, cayó en desgracia en noviembre de 2018 cuando fue arrestado en Japón por acusaciones de mala conducta financiera y pasó 130 días detenido antes de saltarse la fianza y salir de contrabando fuera del país a fines de 2019.
Buscado por Interpol, Ghosn se encuentra ahora en el Líbano, donde fue interrogado por magistrados franceses como testigo.
El exjefe de Dati, Sarkozy, se ha enfrentado a una serie de investigaciones sobre sus asuntos desde que perdió su inmunidad presidencial después de su único mandato en el cargo de 2007 a 2012.
El mes pasado, los fiscales pidieron una pena de prisión de seis meses para el ex presidente en su juicio por violaciones al financiamiento de campañas en su candidatura a la reelección de 2012.
En marzo, se convirtió en el primer presidente de Francia de la posguerra en recibir una sentencia de prisión cuando los jueces le impusieron un período de tres años, dos de los cuales fueron suspendidos, por corrupción y tráfico de influencias por intentos de obtener favores de un juez.
(AFP)
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Fuente: france24.com