La odisea de cientos de miles de personas en Hungría sin agua corriente

Cientos de miles de personas en Hungría viven sin agua corriente. La situación es peor en los barrios marginales de la población gitana, que a menudo sacan el agua de los pozos públicos, empeorando una situación ya difícil.

Ve a buscar agua de un pozo

La familia Johann vive en Tornanádaska, un pueblo habitado en su totalidad por miembros de esta etnia. Doce personas viven en una pequeña casa. Con sus ingresos no siempre tienen suficiente para comprar alimentos. A pesar de su principal problema ahora es que se les ha caído el techo encima.

“Llovió, cayó una tormenta de hielo en el techo. La lluvia lo abolló, lo arrancó, entonces ni los niños podemos dormir aquí por ahora”, lamenta la madre de familia.

El pozo público más cercano a su casa está a trescientos metros.

«Nunca ha habido un poco en esta calle del pueblo porque las casas estaban conectadas a tuberías de agua cuando se construyeron», explica el reportero de Euronews dám Magyar. “Pero ahora a la mayoría de las familias se les ha desconectado el servicio, por lo que la gente que vive aquí tiene que ir a la otra calle a buscar agua”.

Sólo un balde al día para beber, lavar…

La situación tiene muchos inconvenientes. Se pierde mucho tiempo yendo al pozo, sobre todo si hace mucho frío y el más cercano se congela. La gente aquí bebe mucha menos agua de la que debería, y lo que beben es a menudo imbebible. Por lo general, usan un balde de agua por miembro de la familia por día, por lo que no se puede hacer mucho. Lavar la ropa es muy complicado, sobre todo en invierno.

La importancia del suavizante de telas

“El suavizante es muy importante aquí, algo que al principio me costó entender”, recuerda Anikó Kiss, creadora de la Fundación SZOCSOMA. “Pensé que en la pobreza somos frugales, no gastamos dinero en suavizante sino en detergente. Entonces cuando recolectábamos donaciones siempre decía que no queremos suavizante. Entonces me di cuenta de que tenían razón, porque la ropa que se han estado secando durante cinco días, si no se lavan bien, huelen mal.

SZOCSOMA, una fundación local, sostiene que si se proporcionara gratuitamente un metro cúbico de agua por persona al mes, la mayoría de los problemas podrían resolverse. Además, en Tornanádaska la situación va de mal en peor. Hasta hace poco, el pueblo contaba con quince pozos públicos, pero ahora solo quedan cinco de los que sacar agua.

Fuente de este Titular