Publicado:
29 de enero de 2023 01:24 GMT
Según la agencia de fronteras Frontex, en 2022 se registraron 330.000 «entradas irregulares» al territorio del bloque europeo, la cifra más alta desde 2016.
La Unión Europea (UE) amenazó con restringir las visas a ciudadanos de países «no cooperadores» con el bloque sobre migración, que se encuentra en su nivel más alto desde 2016.
En una reunión de ministros del interior de los 27 países miembros de la UE el jueves, se pidió a los estados de origen de inmigrantes que aceptaran a más de sus propios ciudadanos después de haber sido deportados del continente europeo. De lo contrario, podrían enfrentar restricciones en las visas otorgadas.
En ese sentido, los funcionarios calificaron la situación en torno a la migración como «tensa». «Vemos un aumento en las llegadas irregulares», dijo Maria Malmer Stenergard, ministra de Migración de Suecia, y agregó que el regreso de las personas a las que se les negó el asilo en Europa es «un tema muy importante».
En 2021, los países de la UE emitieron 340.500 órdenes de expulsión, pero solo se ejecutó el 21 %. «El nivel actual no es aceptable», dijo Senergard después de la reunión, y agregó que había un «fuerte apoyo» entre los estados de la UE para usar las visas como una herramienta de presión para lograr que terceros países acepten a más de sus propios ciudadanos.
«Si los esfuerzos políticos y diplomáticos [para mejorar la cooperación con terceros países] no producen los resultados esperados, los Estados miembros piden a la Comisión [Europea] volver con propuestas sobre restricciones de visas», enfatizó.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, también insistió en la necesidad de «intensificar» los retornos de migrantes deportados. En ese sentido, propuso un «proyecto piloto» en el primer semestre de este año destinado a agilizar los procedimientos de control en las fronteras exteriores de la UE, con «devoluciones inmediatas» de quienes se consideren no elegibles para el asilo.
Sin embargo, los críticos dicen que la detección apresurada de los solicitantes de asilo en las fronteras de la UE podría carecer de controles y equilibrios adecuados, lo que daría lugar a que a las personas se les niegue la protección cuando la necesitan.
Por su parte, Evelien van Roemburg, jefa de la representación de la ONG Oxfam en la UE, citada por el diario The Guardian, dijo que el enfoque no logra «poner los derechos humanos primero, ya que trata a las personas como peones en las negociaciones comerciales y de desarrollo de la UE». política».
En este contexto, tras las restricciones de movimiento relacionadas con la pandemia, el número de inmigrantes llegados al bloque europeo ha experimentado un nuevo incremento. Según la Agencia Europea de la Guardia Costera y de Fronteras (Frontex), en 2022 se registraron 330.000 «entradas irregulares», la cifra más alta desde 2016.
Fuente: RT.com
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