La prioridad es la energía verde, pero aún quedan obstáculos por delante. El presidente de la Comisión Europea y el canciller alemán, Olaf Scholz, se han reunido este domingo en Berlín. Ursula von der Leyen está pendiente de si la coalición que gobierna su país da el visto bueno o rechaza la propuesta comunitaria de acabar con los motores de combustión para 2035.
“Tenemos que enfocarnos en mantener nuestra posición como líder mundial en energías limpias en el futuro. (Para lo cual) es necesario mejorar las condiciones de competitividad y el marco legal del sector”, aseguró von der Leyen.
La decisión sobre la iniciativa del Parlamento Europeo se ha aplazado sine die en Berlín, lo que supone también un revés para el líder comunitario. El 10 de marzo, von der Leyen hablará sobre energía limpia y cadenas de suministro con el presidente Joe Biden en Washington, en un momento en que los países europeos temen que los nuevos subsidios estadounidenses perjudiquen sus economías.