«Lo que más me cabreó en ese momento fue tener que irme antes de acabar el entrenamiento, justo cuando jugábamos el partido final, para que no perdiera el tren de vuelta a Blanes», explica. melanie en su adiós como futbolista. Fue uno de los sacrificios que tuvieron que hacer los jugadores del Barça hace diez años antes de convertirse en profesionales. La defensa siempre estuvo del lado del club, incluso cuando descendió a Segunda División y tuvo ofertas de clubes de Primera División. Su fidelidad era total y tenía su premio: el sueño de poder levantar una Champions, la primera para un club español.
“Somos unos privilegiados. Sabemos lo que es estar abajo y queremos devolverle al club la confianza que ha depositado en nosotros”, explicó a mundo deportivo hace siete años, cuando empezaba a tomar forma el actual ‘Dream Team’, del que ella ha sido parte indispensable.
Su sonrisa, su humildad, sus eternas ganas, su sacrificio y saber hacer, su firme implicación se echará mucho de menos en el vestuario azulgrana, pero seguirá en el club de su vida. No podía ser de otra manera porque, como ella misma dijo en su emotiva despedida: «Esto no acaba aquí. El Barça es Melanie y Melanie es el Barça».
Fuente: mundodeportivo.com