Hace casi dos años que la bandera británica desapareció de las instituciones europeas, una imagen que cada vez duele a más y más ciudadanos del Reino Unido.
Según una encuesta encargada por el diario The Independent, el 65% de los británicos, casi dos de cada tres ciudadanos, quiere que se repita el referéndum del Brexit de 2016. Hace apenas un año eran el 55%.
La salida del Reino Unido de la Unión Europea ha caído casi como una maldición bíblica sobre el país, golpeado por la crisis económica, incapaz de controlar sus fronteras y azotado por sucesivas crisis gubernamentales. El 56% de los británicos está convencido de que el Brexit perjudica a la economía. El año pasado menos de la mitad (44%) lo creía.
Los cantos de sirena que durante años acompañaron el discurso de los partidarios del Brexit no se han cumplido y la influencia global del país ha empeorado notablemente.
Aunque los que abogan por volver a la familia europea son mayoría, solo un 22% cree que es posible convocar un nuevo referéndum dentro de cinco años. En caso de una nueva consulta, el 54 % de los encuestados optaría ahora por permanecer en la UE, frente al 46 % anterior.