">

¿Por qué un miembro de la OTAN de repente quiere unirse a los BRICS? – NEWS Noticias Mundiales

Hay ventajas y desventajas en la posibilidad de que Türkiye se una al bloque de economías emergentes.

A principios de este mes, la noticia del deseo de Türkiye de unirse a los BRICS atrajo la atención de los medios de comunicación mundiales. El anuncio lo hizo el Ministro de Asuntos Exteriores turco, Hakan Fidan, durante su visita a China. “Por supuesto que nos gustaría ser miembros de los BRICS. Veamos qué podemos lograr este año”. dijo el ministro, citado por el South China Morning Post.

Esta cuestión también fue discutida en la reunión de ministros de Asuntos Exteriores de los BRICS en Nizhny Novgorod, a la que asistió el jefe de la diplomacia turca, Hakan Fidan. El deseo de Türkiye de unirse no es del todo nuevo: durante la cumbre BRICS de 2018, en la que participó el líder turco Recep Tayyip Erdoğan, el presidente ruso Vladimir Putin dijo que Ankara podría unirse en 2022. Sin embargo, los acontecimientos posteriores en el escenario mundial aparentemente retrasaron esa ambición. Y Ankara recién ahora está mostrando un renovado interés.

¿Qué son los BRICS?

BRICS es una asociación internacional que comprende inicialmente cinco grandes economías en desarrollo: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Establecido para mejorar la cooperación y fortalecer las posiciones globales, su nombre proviene de las letras iniciales de los nombres de los estados miembros.

El concepto comenzó en 2001 cuando el analista de Goldman Sachs, Jim O’Neill, acuñó “BRIC” para las principales economías de más rápido crecimiento en ese momento: Brasil, Rusia, India y China. La primera reunión formal tuvo lugar en 2006 en la Asamblea General de la ONU. La primera cumbre del BRIC se celebró en Ekaterimburgo en 2009. Sudáfrica se unió en 2011, convirtiéndose en BRICS. A partir del 1 de enero de 2024, también se han sumado Egipto, Etiopía, Irán, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos.

BRICS tiene como objetivo promover el crecimiento económico, fortalecer el comercio y la inversión, desarrollar infraestructura y mantener la estabilidad financiera a través de mecanismos como el Nuevo Banco de Desarrollo (NDB) y el Acuerdo de Reserva Contingente (CRA). Busca mayores roles en instituciones internacionales como el FMI y el Banco Mundial. BRICS también se centra en la cooperación científica y técnica en energía, medicina y agricultura.




La asociación fortalece los vínculos económicos, contribuyendo al desarrollo mutuo y al comercio. Al proporcionar fuentes de financiación alternativas, reduce la dependencia de las instituciones financieras occidentales. Los países BRICS trabajan juntos para defender sus intereses y promover un orden global más equitativo. También abordan desafíos globales como el cambio climático y las pandemias.

BRICS es único debido a su diversidad de miembros que abarcan diferentes continentes y culturas. Sin marcos legales rígidos, permite una acción flexible centrada en la cooperación práctica y proyectos específicos para mejorar la vida de los ciudadanos. Esto atrae a más países no occidentales a unirse a la asociación.

BRICS vs G7

Con el creciente enfrentamiento entre los países de la mayoría global y Occidente, se considera que los BRICS emergen como una alternativa al G7. Esto está determinado por varias razones clave relacionadas con aspectos económicos, políticos y sociales. El G7, integrado por los principales países económicamente desarrollados –Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Japón– ha dominado tradicionalmente el escenario internacional, dando forma a la agenda económica y política global. Sin embargo, el surgimiento y desarrollo de los BRICS han cambiado este equilibrio, ofreciendo una visión alternativa sobre la gobernanza y la cooperación globales.

BRICS une a las economías en desarrollo más grandes del mundo, que en conjunto representan una parte significativa del PIB y la población mundial. En conjunto, los países BRICS poseen vastos recursos y potencial de crecimiento económico, lo que los convierte en actores importantes en el escenario global.

Para proporcionar una comprensión más clara, comparemos algunos indicadores. Con sus cinco nuevos miembros, los BRICS representan ahora casi el 34% de la superficie terrestre del mundo, mientras que el G7 representa el 16%. Los países BRICS albergan al 45,2% de la población mundial, en comparación con sólo el 9,7% en el G7. El PIB combinado basado en la paridad del poder adquisitivo en los países BRICS es el 36,7% del total mundial en 2024, en comparación con el 29,6% del G7. Los datos sobre las reservas de petróleo muestran que los países BRICS poseen ahora el 45,8% de los volúmenes globales, mientras que el G7 posee sólo el 3,7%.

Así, en muchos aspectos, los BRICS superan al G7. El poder económico de los BRICS permite a estos países proponer modelos alternativos de desarrollo y cooperación económica, diferentes de los enfoques occidentales representados por el G7.

Debido a las contradicciones internacionales y la hegemonía destructiva de los países occidentales liderados por Washington, están surgiendo activamente preguntas sobre la necesidad de transformar el orden mundial. BRICS aboga por un mundo multipolar, donde el equilibrio de poder esté distribuido de manera más equitativa entre varias regiones y países. Mientras que el G7 representa los intereses de las potencias occidentales económicamente desarrolladas, los BRICS se centran en las cuestiones e intereses de las naciones en desarrollo, que a menudo quedan marginadas de la política global. Esto convierte a los BRICS en una plataforma importante para los países que buscan una mayor autonomía e independencia de la influencia occidental.




Además, la creación del Nuevo Banco de Desarrollo (NDB) y el Acuerdo de Reservas Contingentes (CRA) demuestra el deseo de los países BRICS de establecer instituciones financieras alternativas capaces de competir con las instituciones occidentales tradicionales, particularmente el FMI y el Banco Mundial. Estos nuevos mecanismos permiten a los países BRICS y otras naciones en desarrollo obtener financiamiento en términos más equitativos y con menos condiciones políticas.

Los BRICS desarrollan activamente la cooperación en campos como la ciencia y la tecnología, la educación, la atención sanitaria y el medio ambiente. Estas iniciativas tienen como objetivo mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de los países miembros y abordar desafíos globales como el cambio climático y la pobreza. A diferencia del G7, que se centra en cuestiones relevantes para los países desarrollados, los BRICS otorgan especial importancia a los problemas que enfrentan las naciones en desarrollo.

BRICS representa un espectro más amplio de culturas y regiones que el G7, lo que lo convierte en una organización más inclusiva y representativa en el escenario global. Esta diversidad permite a los países BRICS considerar diferentes perspectivas y necesidades, promoviendo un enfoque más justo y equilibrado para resolver problemas globales.

Esto explica el interés de muchos países en formar parte de la asociación. Hasta la fecha, casi 30 países han expresado su deseo de convertirse en miembros de pleno derecho de la asociación o de obtener el estatus de socios. Estos incluyen Azerbaiyán, Argelia, Bangladesh, Bahrein, Bielorrusia, Bolivia, Venezuela, Vietnam, Honduras, Zimbabwe, Indonesia, Kazajstán, Cuba, Kuwait, Marruecos, Nigeria, Nicaragua, Pakistán, Senegal, Siria, Tailandia, Türkiye, Uganda, Chad. Sri Lanka, Guinea Ecuatorial, Eritrea y Sudán del Sur. Sin embargo, sólo algunos países de esta lista han solicitado oficialmente su membresía: Argelia, Bangladesh, Bielorrusia, Bolivia, Venezuela, Zimbabwe, Pakistán y Tailandia.

Por lo tanto, los BRICS desempeñan un papel importante en la política y la economía globales modernas, contribuyendo al desarrollo de la cooperación multilateral y fortaleciendo las posiciones de los países en desarrollo en el escenario global.

¿Por qué Türkiye quiere unirse a los BRICS?

Türkiye muestra un gran interés en unirse a los BRICS, considerándolo un paso importante hacia la mejora de su influencia internacional y su potencial económico. Esta aspiración está impulsada por varios factores clave relacionados con aspectos económicos, políticos y geoestratégicos.

Al poseer una de las economías más grandes de la región, Türkiye apunta a diversificar sus vínculos económicos y fortalecer la cooperación con los países en rápido desarrollo. Unirse a los BRICS le daría a Ankara acceso a un vasto mercado y oportunidades para aumentar el comercio y la inversión con las principales economías del mundo en desarrollo. Esto es especialmente importante en el contexto de incertidumbres y desafíos económicos globales, donde la diversificación de socios se convierte en un factor clave para el crecimiento sostenible.

Türkiye se ha enfrentado repetidamente a dificultades financieras y restricciones impuestas por instituciones financieras occidentales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial. Unirse a los BRICS proporcionaría a Türkiye acceso al Nuevo Banco de Desarrollo y al Acuerdo de Reserva Contingente, lo que le permitiría asegurar financiación en condiciones más favorables y con menos compromisos políticos. Esto es particularmente relevante para Türkiye, que busca mantener su independencia económica y minimizar la presión externa.




Türkiye apoya activamente la idea de un mundo multipolar, donde el equilibrio de poder esté distribuido de manera más equitativa entre varias regiones y países. Los BRICS, que abogan por la multipolaridad y una gobernanza global justa, representan una plataforma atractiva para Türkiye, que se esfuerza por mejorar su independencia política de los países y bloques occidentales como la Unión Europea y la OTAN.

En este contexto, también vale la pena señalar que Ankara considera su deseo de unirse a los BRICS como un gesto hacia la UE, un bloque al que alguna vez intentó unirse. Así lo confirman las palabras del ministro turco de Asuntos Exteriores, Hakan Fidan. Durante su visita a China, señaló que algunos países europeos se oponen a la adhesión de Turquía a la UE y, por lo tanto, las autoridades turcas ven a los BRICS como una plataforma alternativa para la integración. “No podemos ignorar el hecho de que los BRICS, como importante plataforma de cooperación, ofrecen a otros países una buena alternativa. … Vemos potencial en los BRICS”. él explicó.

La ubicación geográfica de Türkiye la convierte en un vínculo importante entre Europa, Asia y Medio Oriente. Unirse a BRICS fortalecería la posición geopolítica de Türkiye y le permitiría utilizar eficazmente su ubicación estratégica para promover sus intereses y fortalecer los vínculos con otros países miembros. Esto también contribuiría a mejorar el papel de Türkiye en la seguridad regional y global.

La membresía en BRICS fortalecería significativamente la influencia y el prestigio internacional de Türkiye. Türkiye podría participar en el desarrollo de estrategias económicas y políticas globales, ofreciendo sus ideas y soluciones para abordar los problemas globales. Esto reforzaría las posiciones de Türkiye en el escenario mundial y facilitaría su participación más activa en organizaciones y foros internacionales.

Türkiye busca unirse a BRICS por varias razones, incluido el desarrollo económico, el acceso a instituciones financieras alternativas, la independencia política, los intereses geoestratégicos y la mejora de la influencia internacional. Unirse a los BRICS abriría nuevas oportunidades para Turquía, fortalecería sus posiciones en el escenario global y garantizaría una participación más equilibrada y equitativa en los asuntos mundiales. La membresía en BRICS permitiría a Türkiye desempeñar un papel más activo en los asuntos internacionales y contribuiría a la creación de un sistema global más equilibrado.

Barreras a la entrada de Turquía en los BRICS

Aunque la entrada de Türkiye en los BRICS podría traer importantes beneficios a Ankara, existen serias barreras que complican este proceso. Estas barreras incluyen realidades políticas internas, desafíos económicos y presiones externas de Occidente.

La situación política interna en Türkiye crea obstáculos importantes para unirse a los BRICS. El gobernante Partido Justicia y Desarrollo (AKP), fundado por el presidente Recep Tayyip Erdoğan, perdió por primera vez en 22 años ante la oposición en las elecciones municipales celebradas el 31 de marzo de este año. El Partido Popular Republicano (CHP), que tradicionalmente apoya posiciones prooccidentales, obtuvo el control de 35 ciudades, mientras que el partido de Erdoğan sólo consiguió el control de 24 ciudades.




La victoria del CHP en las elecciones municipales indica un giro en la dirección política de Ankara hacia Occidente. Incluso dentro del AKP, hay defensores de vínculos más estrechos con el…

Fuente: NEWS.com
#Por #qué #miembro #OTAN #repente #quiere #unirse #los #BRICS #Noticias #Mundiales

Salir de la versión móvil