“Quiero contar una historia, una historia no muy común, una historia única, una historia que no le pasa a nadie, quiero contar cómo un cierto día se me cruzaron dos ángeles con el corazón más grande que el Everest… Jueves julio 28, como todos los mediodías para preparar a mi hija Valentina, quien muchos ya saben sufre de una discapacidad motriz que le dificulta caminar, ya que utiliza andadores ortopédicos para movilizarse…” Así comienza esta historia que cuenta la misionera Tania Montenegro en su cuenta de Facebook y que realmente conmueve a propios y extraños, sabiendo que aún quedan personas buenas en el mundo.
este jueves la FM 89.3 Santa Maria das Missões se comunicó con esta madre de Posada, quien detalló cómo se dieron los hechos que cambiaron su vida, la de su hija Valentina y la del resto de su familia.
“Tengo dos hijas, Lara de 8 años y Valentina de 4. Mi última hija nació prematura, a los seis meses. Estuvo dos meses en Neo. A consecuencia de este parto prematuro, quedó con una discapacidad motora, mental y cognitivamente está bien. Aunque tiene esta discapacidad motriz que le impide moverse con normalidad. Hace kinesiología, la atiende un neurólogo en el Hospital Pediátrico y usa un andador ortopédico.
A lo que agregó: “Ella ya empezó el kínder, tiene 4 años en la Escuela 106. Tengo a mi esposo que es mecánico de motos y yo soy estudiante de enfermería en la Universidad Nacional de Misiones, hasta que un día nos pasó algo que le pasa a una persona en un millón”.
Luego de esta breve presentación, se le pidió que contara detalles de lo que le sucedió días atrás y cambió la vida de toda su familia. “Todos los días llevaba a Valentina a su escuela. Vivimos a cinco cuadras, pero hay un barranco muy empinado y se me hizo muy difícil caminar por él. Después Le dije a mi esposo que la llevara en moto ya que estaba cerca. No estuvo muy de acuerdo por el peligro que conlleva, pero como estaba cerca, aceptó.
Luego agregó: Así que la semana pasada la puse en la bicicleta, conseguí el andador y fui a la escuela. Sorprendentemente, no quería quedarse en el jardín, a pesar de que ella es muy feliz cuando llega a la escuela. Pero ese día no quiso quedarse. Entonces la bajé, crucé Avenida Lavalle, la senté en un muro, preparé la bicicleta, le puse el andador y nos alistamos para ir a casa”.
Con un dejo de emoción en su voz, continuó su relato: “Dos cuadras más adelante, escuchó la voz de una mujer que me preguntaba si podía hacerme una pregunta. Pero en realidad bajó su socio que se llama Facundo y me dice ¿Qué dices si cambio el coche por la moto?…y mi primera respuesta fue no. Simplemente porque no tengo el dinero para hacer tal transacción. Pero el hombre vuelve a tomar la palabra y dice “No estoy pidiendo dinero. Te vimos con tu bebé y queremos ayudarte. Queremos regalarte el coche para que puedas moverte con él con tranquilidad y comodidad’, Mientras no podía creerlo»
Tania dijo que una vez más le dijo que no a esta pareja de «ángeles» que de repente aparecieron en su vida así. Pero la señora insistió y le dijo «tienes que aceptar, vimos cómo llevabas a tu bebé y queremos hacer una buena acción”. El señor te pidió tu número de teléfono y agendar el tuyo porque «Haré todo el papeleo para que te lo pongan a tu nombre, piénsalo y lo hablamos».
Esta pareja solo vio una vez a Tania Montenegro y su bebé en el semáforo y eso las marcó para siempre. Cuando Facundo vio a esa madre con su bebé cruzando la calle, con un andador y la moto, se asombró y le dijo a su esposa: ‘Usted vio la fuerza de voluntad de esa señora, y si le damos el carro para llevar al bebé’ y la A. La respuesta fue sencilla y sincera, por parte de su esposa ‘sí se lo vamos a dar’, sin duda y la siguieron para hacerle la propuesta.
Un cambio total de vida
Ante la pregunta de si este coche les ha cambiado la vida, Tania muy contenta responde: “Para mí ha cambiado totalmente mi vida, la mía, la de Valentina, la de toda mi familia. Pero este auto no es un bien material, como escribí en facebook. Para mi Es una posibilidad que le dan a mi hija de viajar cómoda, para que no se moje, para que no pase frío, calor. no es solo un auto es rescatarla de momentos malos o desagradables”.
También queríamos saber cuándo fue el día en que este ‘milagro’ empezó a gestarse y en qué día se hizo realidad, es decir, recibió las llaves del coche en la mano. “Fue todo muy rápido. El pasado jueves 25, por la tarde, me hicieron la propuesta y ayer me dieron las llaves. Todos los días estábamos en contacto, pero aún desconfiábamos. Mi esposo no me creyó hasta que vinieron a mi casa el domingo, Lo conocieron y…
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Fuente: primeraedicion.com.ar