El preparador físico Sebastián Avellino Vargas, de 43 años, de Universitário, fue acusado de racismo y detenido por la Policía Militar después de que el Corinthians ganara 1-0, este martes (11), por la Copa Sudamericana, en São Paulo.
Testigos afirmaron que hizo gestos racistas. Según la Secretaría de Seguridad Pública de SP, policías realizaban labores de seguridad en el lugar cuando el acusado se colocó frente a la multitud brasileña y simuló los gestos de un mono.
Vargas fue llevado a una comisaría dentro del estadio del Corinthians. Luego fue trasladado a otro DP, donde rindió testimonio en presencia de un traductor. Su audiencia de custodia está programada para este miércoles por la tarde (12).
El caso fue registrado como prejuicio racial.
La defensa de Vargas no pudo ser contactada para comentar sobre la detención.
caso desbato
El caso se parece a otro, ocurrido en 2005, también en São Paulo. En ese momento, el entonces delantero Grafite fue víctima de racismo durante un partido entre São Paulo y Quilmes (ARG), en Morumbi, por la Copa Libertadores.
Grafite recuerda haber sido llamado «negro de mierda» por el argentino Leandro Desábato. Tras el partido, el delegado Osvaldo Nico Gonçalves ingresó a la cancha y detuvo al defensor por racismo. Después de pasar dos días en la cárcel, Desábato pagó una fianza de R$ 10.000 y fue liberado para regresar a su país.
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