El Ministerio de Salud de la Nación informó este sábado otras 338 muertes y 18.555 casos nuevos del coronavirus, en medio de la decisión del Gobierno de extender las restricciones hasta el 9 de julio, especialmente la profundización del cierre de las fronteras.
De esta forma, y siempre según cifras oficiales, Argentina suma 92.317 muertos y 4.393.142 contagios desde el inicio de la pandemia.
De los últimos fallecidos, 211 residían en la provincia de Buenos Aires, 41 en Córdoba, 22 en la Ciudad de Buenos Aires, 16 en Mendoza, diez en Río Negro, nueve en Santa Fe; seis en Chaco y Salta; cuatro en Misiones y Chubut; dos en Entre Ríos y Formosa; y uno en Corrientes, La Pampa, San Luis, Santiago del Estero y Tucumán.
La provincia de Buenos Aires también fue el distrito que reportó más infecciones en el día, con 6.048, seguida de Córdoba (2.141). Santa Fe (1.828), Capital Federal (1.343), Chaco (765), Corrientes (653), Santiago del Estero (652) y Entre Ríos (605).
Luego se ubicaron Salta (559), Tucumán (489), Mendoza (465), Formosa (450), San Luis (422), La Pampa (389), Catamarca (292), Río Negro (244), Misiones (210 ), Neuquén (203), Chubut (191), Jujuy (178), La Rioja (177) y San Juan (142).
Santa Cruz (77) y Tierra del Fuego (32) fueron las únicas provincias que reportaron menos de 100 positivos.
En las últimas 24 horas se realizaron 92.529 pruebas, con una positividad del 20%. Desde el inicio del brote se han realizado 16.367.985 pruebas diagnósticas, de las cuales el 26,8% confirmaron un contagio.
El informe de la cartera de salud volvió a reflejar la tendencia a la baja de los pacientes ingresados en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), con 6.998, una disminución de 59 en un día. La ocupación de camas es del 70,3% en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y del 71,6% en el resto del país.
Argentina superó la barrera de los 92 mil muertos. Foto Juano Tesone
El Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 411/2021 suscrito por el presidente Alberto Fernández y todo el gabinete nacional, mantuvo el cierre de fronteras y estableció un cupo de 600 personas para el regreso al territorio nacional para «retrasar» en lo posible la entrada de nuevas variantes, especialmente el Delta, cuya respuesta a «la efectividad de las vacunas se desconoce».
«En el contexto epidemiológico actual, el riesgo de introducir nuevas variantes, aún más transmisibles, podría generar un fuerte y elevado aumento de casos, lo que conduciría inevitablemente a una mayor mortalidad», remarca el texto.
La norma también establece que «quienes regresen del exterior entre el 1 de julio y el 31 de agosto, están obligados a aislarse en los lugares que determinen los gobiernos provincial y CABA, durante 10 días, contados a partir de la prueba realizada en el país de origen». .
La estancia en los lugares de aislamiento estará a cargo del pasajero y se controlará que quienes regresen del viaje estén en sus domicilios.
Se interpondrán denuncias penales en caso de incumplimiento del aislamiento, de acuerdo con los arts. 205 y 239 del Código Penal, por violación de medidas contra epidemias y desobediencia al poder público, sancionables con prisión de seis meses a dos años y prisión de 15 días a un año, respectivamente.
Renuncia de Cafiero
El Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, manifestó que la variante Delta «llegará inevitablemente» a Argentina en los próximos meses y es por eso que el gobierno nacional sigue tomando medidas para «retrasar esta llegada y avanzar con gran celeridad en la campaña de vacunación».
«Se proyecta que la variante Delta prevalecerá en Europa a fines de agosto y llegará indefectiblemente a nuestro país», dijo en declaraciones a Radio CNN.
El funcionario dijo que es por eso que el gobierno nacional sigue «tomando medidas para retrasar su llegada y avanzar con gran celeridad en la campaña de vacunación, redoblando esfuerzos con los nuevos contratos que se están cerrando» con los distintos laboratorios, como sucedió ayer con la anuncio de la compra de 24 millones más de vacunas Sinopharm.
Carla Vizzotti y Santiago Cafiero, en Ezeiza, recibieron un nuevo lote de vacunas de AstraZeneca. Foto: Presidencia
“Avanzar con gran celeridad la campaña de vacunación y redoblar esfuerzos con nuevas llegadas de vacunas y nuevos contratos que se están firmando para lograr la inmunización al tiempo que se retrasa la entrada de cualquier variante diferente, para lo cual hay que destacar los ya conocidos controles sanitarios y fronterizos” , enfatizó.
“Los controles fronterizos hoy son de vuelos internacionales donde la persona que viene tiene que tener un PCR negativo para poder subir al avión y cuando llega al aeropuerto de Ezeiza le hacen otra prueba que tiene que dar negativo. Luego, tienen que hacer un aislamiento obligatorio en su domicilio o en el lugar que establezca la jurisdicción de residencia ”, explicó.
En este sentido, destacó que «es necesario que las jurisdicciones acentúen los controles» y recordó que «el incumplimiento de estas normas es sancionado por la ley y se realizarán las denuncias correspondientes».
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Fuente: Clarin.com