«Erizos de mar», dictó su madre desde San Luis. Ella era la única persona que conocía que podía leer ruso y estaba traduciendo para él un artículo que había sido escrito por un equipo de científicos en Siberia. En ese momento, Tamara Rubilar, doctora en biología, abrió los ojos. Lleva 15 años trabajando con esa especie y podría ser la respuesta al problema de salud que aquejaba a su hijo.
Antes de eso, se había puesto en contacto con varios investigadores especializados en inmunología y alergias, pero ninguno había podido encontrar la solución. «El denominador común eran las moléculas antioxidantes que reducían la inflamación», explica. Así fue que en 2014 empezó a consumir huevas de erizo de mar con su familia y funcionó. Pero Rubilar notó que esto podría convertirse en algo más.
“Soy de Chubut y la provincia empezó a animar a los científicos que tenían ideas que se podían convertir en emprendimientos”, dice. Para llevarlo al consumidor final el ingeniero de alimentos Luca Barja entró en escena y ambos co-fundador de Antioxidantes Promarineuna empresa de base tecnológica que desarrolla productos de las huevas no fertilizadas de erizos de mar.
La clave son los espinocromos, una molécula presente en la especie Arbacia Dfresnii que protege la semilla de virus, óxido y otros peligros potenciales. Para no dañar a los animales, desarrollaron un método para recolectarlos.
“Pensamos en cómo presentarlo, desde pastillas hasta polvo, pero encontramos que la forma líquida era la mejor para absorberlo rápidamente. Se alcanza con una cucharadita de té al día“, explican. Tras dos años de trabajo, consiguieron incluir los erizos de mar en el Código Alimentario y el pasado mes de julio lanzaron Marine Epic, un agua elaborada a partir de las huevas a la que se le añaden vitaminas B1, B2, B5 y B12; y Marine Aceite fusión, con Omega 3, astaxantina y vitamina E.
Primero lo lanzaron en su tienda en línea para ver cómo respondería el público. Más tarde comenzaron a trabajar con nutricionistas para mostrarles los beneficios y correr la voz. La otra ventana que ven son las tiendas de suplementos dietéticos y los mercados de salud.
¿Qué volumen de ventas tiene?
nuestro objetivo son 1000 unidades por mes y hoy estamos al 20 por ciento. Tenemos nuestra propia planta donde hacemos la comida para los erizos de mar, producimos los extractos y los superalimentos y también hay un ala de producción acuícola. En los próximos años, podríamos considerar una ronda de la serie A para ampliarla. Hemos identificado nichos a cubrir en la parte nórdica de Europa y en EE.UU.
Tenemos un tercer suplemento que está en etapa de prueba. Un jarabe diseñado para las secuelas del COVID. Empezamos en octubre de 2021 y seguramente será para 2023.
en cifras
Fundación: 2019
inversión inicial: 400.000 dólares estadounidenses
producción anual (pags): 500.000 unidades
Empleados:6
La versión original de esta nota fue publicada en el número 346 de la revista Apertura.
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Fuente: cronista.com