Suárez, contundente sobre la mano ante Ghana: «No tengo que pedir perdón…» /Titulares de Deportes

Al recordar el Mundial de Sudáfrica 2010, una de las primeras imágenes que vienen a la mente de los aficionados al fútbol, ​​además de la final entre España y Holanda, es la épica parada de Luis Suarez contra Ghana. La acción del delantero supuso el inicio de un partido histórico para el Uruguay y este viernes, 12 años después, se vuelven a enfrentar en otra «final» pensando en los octavos de final.

«Algunos fanáticos ghaneses piensan que eres el diablo y esperan que te retires». La consulta de un periodista ghanés alimentó un preestreno lleno de morbo y el Deadshot disparó con fuerza: «No necesito disculparme. Toqué el balón con la mano, pero el ghanés falló el penalti. Yo no lo hice. Me expulsaron y ejecutaron el penalti. No cometí un error, no es mi responsabilidad». .»

La histórica atajada de Suárez ante Ghana en 2010

Así lo expresó el delantero que jugó en Nacional el semestre pasado, Pistolero vio roja, Asamoa Gyan asumió la responsabilidad de marcar el penalti en el minuto 120 y clasificar por primera vez a una selección africana a las semifinales de un Mundial, pero Su disparo rebotó en el travesaño y la serie se fue a tiros de doce pasos. Allí, en medio de una definición del hecho, Loco Abreu declaró la victoria de Uruguay por 4-2 al anotar el último tiro, su marca registrada.

“Quizás los jugadores que hablan de ‘revancha’ tienen ocho años y ni lo recuerdan ni lo han visto en imágenes. El otro día fuimos a jugar con Portugal y nadie dijo ‘revancha’ porque los eliminamos en 2018. No se puede vivir con cosas del pasado y pensar en la revancha”, añadió Lucho, que dejó un claro ejemplo: «Me cagué con (Giorgio) Chiellini (el mordisco en Brasil 2014) y luego jugué contra él y le di una mano y un abrazo».

Por otro lado, sobre la polémica generada por las declaraciones de Josema Giménez y Edinson Cavaniel día 9 trató de calmar los ánimos en vísperas de un partido importante, en el que Uruguay está obligado a ganar y esperar que Corea del Sur no gane a Portugal, escenario en el que entraría en juego la diferencia de goles.

“Tan pronto como un jugador de fútbol termina un partido, puede decir palabras que pueden malinterpretarse. Las de Josema son muy claras, eso es lo que sintió en ese momento, pero no hay entrenador en el mundo que no salga a ganar. No podemos decir que era un mensaje para el entrenador. Ni el Maestro Tabárez ni Alonso te dirán que no salgas a ganar. Josema dijo eso porque se siente responsable. Hay que ser autocrítico y responder en el campo”, dijo.

Finalmente, tras ser titular ante Corea y suplente ante Portugal, Lucho está listo para aportar desde su lugar: “Obviamente, con los años, físicamente no eres el mismo de antes, pero puedes aportar inteligencia y movimiento, lo que te llevó a jugar a un gran nivel… El nivel mundialista es muy físico y muy alto. El jugador tiene que saber esto, comprender y analizar las características de los rivales a los que nos enfrentamos”.