El barco «Skipper» incautado por Estados Unidos
El «enorme petrolero» incautado el miércoles frente a las costas de Venezuela por las fuerzas de Estados Unidos fue identificado como el Skipper, con un largo historial de irregularidades.
En su último viaje, el Skipper zarpó del principal puerto petrolero de Venezuela: el Complejo Industrial Petroquímico José Antonio Anzoátegui (Terminal José) en el Estado de Anzoátegui, entre el 4 y el 5 de diciembre, transportando aproximadamente 1.1 millones de barriles de crudo pesado Merey, con destino a Cuba.
Antecedentes y operación de incautación
El buque había estado transmitiendo posiciones AIS falsificadas durante la operación de carga. Según la fiscal general de EE. UU., Pam Bondi, el buque pertenece a una red que apoya a organizaciones terroristas extranjeras, lo que legitimó la acción de incautación. El Skipper, anteriormente conocido como «Adisa», está bajo control de las autoridades de EE.UU. en algún lugar de las aguas del Caribe, específicamente cerca de la Zona Económica Exclusiva de Granada.
El barco navegaba bajo bandera falsa de Guyana (no registrado allí) cuando fue abordado en un operativo en el que no se registraron heridos.
Impacto en el mercado petrolero
La incautación podría indicar una intensificación de los esfuerzos para perseguir el petróleo de Venezuela, la principal fuente de ingresos del país. Los precios del crudo Brent subieron levemente el miércoles, ya que la noticia de la incautación avivó las preocupaciones sobre el suministro a corto plazo. Los analistas advirtieron que la medida podría amenazar a las empresas de transporte marítimo y perturbar aún más las exportaciones de petróleo de Venezuela.
Acción militar y sanciones
Fue la primera acción conocida contra un petrolero desde que el presidente de EE. UU., Trump, ordenó un despliegue militar masivo en la región y llevó a cabo ataques contra presuntas embarcaciones de drogas. Los helicópteros utilizados en la operación se lanzaron desde el USS ‘Gerald R. Ford’, que fue enviado al Caribe en noviembre. La incautación fue coordinada por varias agencias de seguridad de EE. UU.
Estados Unidos impuso sanciones al petrolero por su participación en el comercio de petróleo iraní cuando se llamaba el ‘Adisa’. El buque ha estado involucrado en operaciones de alto riesgo de la «flota oscura», cargando petróleo crudo en puertos de Venezuela e Irán, realizando transferencias STS en diversas zonas y con un patrón de falsificación de AIS.
Conclusión
La incautación del petrolero Skipper por parte de Estados Unidos evidencia la intensificación de los esfuerzos para perseguir el petróleo de Venezuela y combatir actividades ilícitas en el mar. Esta acción ha generado preocupaciones sobre el suministro a corto plazo y ha puesto en alerta a las empresas de transporte marítimo. Es un paso significativo en la lucha contra el comercio ilegal de petróleo y la financiación de organizaciones terroristas extranjeras.
