La popularización del coche eléctrico que pretende la Unión Europea de aquí a 2035, como muy pronto, tiene más contras que pros. Los fabricantes tienen su papel, una transformación total del modelo de negocio y los países la instalación de puntos de recarga. Un informe de la ACEA señala la falta real de estos dispositivos en los países europeos.
En 2035, la Unión Europea tiene la intención de no se vende un solo coche equipado con motor de combustión de gasolina y diésel, solo eléctrico y modelos impulsados por hidrógeno, por lo que los híbridos enchufables también quedarán fuera de la norma futura. Los fabricantes ya han asumido que, a partir de esa fecha, tendrán que cambiar el modelo de negocio, muchos anticipándose unos años a la propuesta que aún no ha sido votada por los países miembros.
Y la verdad es que no muchos son para el trabajo, porque ya están mostrando su desacuerdo en apoyo de su industria y no hay previsiones de que voten a favor del 2035, ya que piden un retraso de algunos años. Los altísimos precios de la nueva electricidad son parte del problema, pero también el que corresponde a los países, el de instalar tantos puntos eléctricos como sea necesario, y en el mismo número de gasolineras. Estas instalaciones están a menos de 100 kilómetros entre sí, por lo que la cuenta es un problema.
ACEA muestra países sin infraestructura para coches eléctricos
Un informe reciente mostró que solo tres países europeos dominaban 70% de los cargadores disponibles en el continente, Francia, Alemania y Holanda, al mismo tiempo que demuestra que los alemanes y los alemanes también tienen una gran deficiencia en este campo. Ahora, se conoce el informe publicado por ACEA, la asociación que aglutina a los fabricantes europeos y defiende sus intereses, destacando la enorme carencia de estas instalaciones en los países del Viejo Continente, lo que vienen denunciando desde hace tiempo y que Europa ignora.
El informe ACEA muestra los países más y menos desarrollados en el número de cargadores eléctricos, con el importante detalle de que solo Diez de los 27 Estados miembros ni siquiera tienen un cargador cada 100 km en las carreteras principales, incluyendo cualquier tipo de carretera, ya sea autovía, nacional, autonómica o local, lo que imposibilita la estrategia europea.
Fuente: ACEA, EAFO, ERF, EUROSTAT / * A finales de 2020
De esta tabla se sigue que 18 estados de la Unión Europea tienen menos de 5 puntos de recarga por cada 100 km, y solo cuatro tienen más de una docena de cargadores cada 100 km, con la gran excepción de Polonia que tiene un solo cargador cada 250 kilómetros de distancia. Hay trabajo por delante Frans Timmermans, vicepresidente de política ecológica de la Comisión Europea, quien hace un par de meses afirmó la necesidad de un plan para la instalación rápida de un millón de cargadores en todos los países europeos para 2025, para asegurar la implementación del coche eléctrico.
Fuente: motorpuntoes