Los millonarios de la pasta: cmo una familia construy un imperio global vendiendo fideos

Dentro de la negocio de pasta, Barilla es el principal actor a nivel global. Evolución de una tienda con producción artesanal a tener fábricas en varios países y una producción que supera los 2 millones de toneladas de producto. Y todo empezó en un pequeño local de parmesano hace 146 años.

Pietro Barilla nació en 1845 en Parma., dentro de la región de Emilia-Romaa. Era el sexto de diez hermanos y, al igual que sus hermanos mayores, Aprendió todo sobre el mundo del pan y la pasta con su abuelo.. Cuando terminó su formación decidió abrir su propio local. En 1877 abrió su tienda. en Via delle Repubblica, cerca de la Iglesia del Santo Sepulcro.

Las ventas no coincidieron con el entusiasmo de Barilla; incluso tuvo que pedir crédito a sus proveedores para seguir produciendo en su taller. Intentó abrir una segunda sucursal para intentar sumar volumen, sin embargo esto tampoco funcionó. Para no bajar el telón, opté por cerrar el primer local, poner el segundo a nombre de su esposa y declararse en quiebra. Así logró mantenerse a flote y, poco a poco, el negocio empezó a ascender.

La expansión de Barilla

Para 1898 la familia había ampliado el almacén y multiplicado la producción a 25 quintales por día. Después de la muerte de su esposa, La empresa pasó a nombre de sus hijos Gualtiero y Riccardo.. El primero era seminarista y estaba a punto de viajar a China como misionero cuando decidió quedarse para ayudar en la empresa familiar, mientras que Riccardo, el mayor, trabajaba allí desde los 14 años.

hermanos profesionalizaron el proyecto. Crearon una empresa, convirtieron a Barilla en una marca y abrieron una planta industrial con capacidad para producir 8 toneladas de producto por día.. A su vez, cambiaron las máquinas de madera por prensas de hierro.

Riccardo Barilla, que había quedado al mando en 1919 tras la muerte de Gualtiero, forjó estrechos vínculos con el fascismo. Además de donar dinero y productos, también tenía vínculos con varias personas importantes del partido, lo que le permitió convertirse en proveedor de organismos estatales. Según el expediente oficial de la empresa, estas relaciones podrían haber sido parte de una estrategia comercial.

Los hermanos que perdieron la empresa.

A finales de los años 40 los que quedaron al mando fueron Pietro y Giovanni Barilla, hijos de Riccardo. ellos se encargaron de dar un salto de marketing y creatividad a la marca. Pietro había regresado de Estados Unidos con muchas ideas para aplicar en la empresa. Lo primero que hizo fue cambiar el empaque al ya clásico envase de cartón, también mandó diseñar un logo y amplió la distribución a nivel nacional con spots televisivos.

En 1969 Barilla inauguró la fábrica de pasta más grande del mundo. en Pedrignano, en las afueras de Parma. La planta contaba con 120 metros de líneas de producción y una capacidad diaria de 1000 toneladas de pasta.

Pero eran tiempos turbulentos en Italia y Europa. Entre la recesión económica, la crisis del petróleo y la agitación social y política por el terrorismo, los Barillas comenzaron a analizar qué hacer. Giovanni quería vender la empresa, mientras que Pietro quería conservar el 100% aunque no tenía suficiente capital. Finalmente, En 1971 vendieron la empresa al estadounidense WR Grace..

Barilla estuvo en manos extranjeras durante ocho años. Durante ese tiempo, Grace amplió la empresa mediante adquisiciones, como la compra de la napolitana Voiello, además del lanzamiento de nuevas líneas (snacks, productos de panadería y galletas). Después de varios intentos, Pietro Barilla logró recuperar la empresa de su familia en 1979.

Globalización y controversia

En los 90 alcanzaron la cima. Los hijos de Pietro: Guido, Luca y Paolo.. El trío fue el encargado de internacionalizar la marca. Compraron empresas en Turquía, México y Francia y abrieron filiales en Estados Unidos. También sumaron producción de otros segmentos, desde cremas para untar hasta salsas. Hoy la empresa cuenta con 28 fábricas en todo el mundo. (14 están en Italia) y tiene presencia en 100 países.

La globalización de la empresa trajo algunos inconvenientes. En octubre de 2022, dos personas demandaron a Barilla America Inc. tras descubrir que la pasta que venden en Estados Unidos no se fabrica en Italia sino en sus plantas de Illinois y Nueva York. Lo mismo ocurrió en Canadá el pasado mes de septiembre.

El grupo Barilla facturará 4.663 millones de euros en 2022. Poco más de un tercio de su negocio (37,7%) procede de Italia, mientras que el resto de Europa se lleva el 34 por ciento. Los hermanos conforman uno de los clanes más ricos del país con una fortuna que supera los US$ 1.100 millonessegún Forbes.