Lionel Messi, el astro del fútbol argentino, volvió a ser noticia esta semana luego de un incidente con un hincha que se volvió viral en las redes sociales. El jugador se encontraba en su auto cuando varios seguidores se acercaron para pedirle autógrafos. Sin embargo, Messi se molestó cuando uno de ellos le pidió que dedicara un saludo especial a su hijo que cumplía 18 años.
El video del momento se viralizó rápidamente, generando diversas reacciones en las redes sociales. Algunos usuarios defendieron al jugador, señalando que es comprensible que pueda cansarse de firmar autógrafos constantemente. Incluso el periodista Pablo Giralt bromeó diciendo: “Confirmado, Messi es humano: no tiene paciencia infinita”.
Por otro lado, en un gesto más amable, Antonela Roccuzzo, la esposa de Messi, dedicó un tierno mensaje en Instagram a su hijo Ciro, quien cumplió 6 años. En la publicación, compartió fotos del pequeño a lo largo de los años, recibiendo felicitaciones de distintas personalidades.
Este episodio demuestra que, a pesar de ser una figura pública reconocida mundialmente, Messi también tiene sus momentos de humanidad y límites. A pesar de su gran éxito en el campo de juego, es importante recordar que también es una persona con sus propias emociones y necesidades.