El debate sobre la segunda megacausa por los abusos cometidos en el instituto para niños sordos Antonio Próvolo de Luján de Cuyo finalizará este miércoles con la lectura de sentencia a los nueve imputados.
La jornada comenzó a las 8:30 en la sala 15 del Polo Judicial, donde los imputados tuvieron la oportunidad de dar su última palabra antes del veredicto.
Ante la presencia de las víctimas y del Tribunal Penal integrado por las juezas Gabriela Urciuolo, María Belén Renna y María Belén Salido, la primera en hablar fue la psicóloga. Cecilia Raffoquien apuntó contra la fiscalía y la denuncia, afirmando que fueron años duros, donde experimentó ataques de pánico y tuvo que acudir a tratamiento psiquiátrico.
El acusador no presentó cargos durante el juicio, por lo que estuvo al borde de la absolución.
Luego fue el turno de la monja. Asunción Martínez, que corre el riesgo de pasar 10 años de prisión. Habló de rechazo y condena social. Detallando que cuando sale a la calle recibe insultos, burlas y tratos humillantes.
“Quiero comenzar con una frase «toda persona es inocente hasta que se demuestre lo contrario».«, dijo al inicio de su exposición, refiriéndose al trato que recibió por parte de la Fiscalía y los representantes de las víctimas.
“Este juicio nos ha robado mucho y espero que no nos robe la esperanza de salir de aquí y salir mujeres más fuertes para luchar por la verdad.«, destacó y cerró con «naceremos de nuevo de las cenizas».
Por su parte, el exdirector Valeska Quintanaquien llega a esta instancia acusado, pero también sin cargos, dijo entre lágrimas: “No es fácil trabajar en una escuela de educación especial”.
A su vez, Cristina LeguizaOtro de los directivos del Instituto, que llegó sin cargos a esta etapa del debate, dijo: “Llevo muchos años en silencio y me cuesta hablar después de haber oído tanto.”.
Y agrego: “Tenía mucho miedo y lo que me queda hasta ahora es miedo”.
Laura Gateán, exdirectora que llegó sin cargos, también se refirió a lo difíciles que han sido estos años. Agradeció a su esposo, a sus hijos y a los maestros de la escuela.
Uno de los más complicados es Graciela Pascual, la licenciada en trabajo social y representante legal del Instituto, de 67 años. ella podría pasar 18 años de prisiónde conformidad con la sentencia solicitada por la Fiscalía y la denuncia.
Se le imputa participación necesaria en términos de comisión por omisión, derivada de la violación del deber de garante en los delitos imputados a Horacio Corbacho, Nicola Corradi, Armando Gómez, Jorge Bordón y un ex jardinero.
Entre lágrimas agradeció a sus abogados y le dijo a la fiscalía: “Espero que Dios los perdone por hacer tanto daño.”.
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Con informacion de Medios de Mendoza y Telam
