El Gobierno lituano va a presentar un paquete energético que, según la coalición gobernante de centro-derecha, será uno de los más importantes de la UE, en términos de PIB.
En 2023, el 2 % del PIB lituano se destinará a compensar a los consumidores, medidas de fomento de ingresos y ayuda a las empresas. Además de limitar los precios del gas y la electricidad, el plan impone limitar la calefacción en los edificios públicos a 19 grados y el aire acondicionado a 27 grados, así como el teletrabajo los viernes y lunes, y el fomento de las inversiones en energías renovables.
En Francia, el aumento de los precios de la energía ha obligado a cerrar las piscinas públicas. Según el director de una piscina, los costes energéticos han pasado de 600 millones de euros a 1,6 millones. También se estudia la posibilidad de reducir el número de trenes para ahorrar energía este invierno, lo que significa que los que circulen estarán llenos. Y los alcaldes franceses aprecian dónde pueden apagar el alumbrado público después de la medianoche sin comprometer la seguridad ciudadana.
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