Triste temporada en términos generales y deprimente último partido contra Villarreal con una derrota por 0-2 en un aburrido Camp Nou. No era el escenario ideal para que los jugadores que van a dejar el Barça a final de curso y la afición conectaran emocionalmente a la hora del adiós. Era más bien el día de las despedidas ‘clandestinas’ hasta Luuk de Jongquién Xavi Hernández No dio minutos, decidió dar el paso de agradecer el apoyo recibido por la afición en un club como el azulgrana con el que se ha sentido identificado. Sus compañeros ya se habían ido a la ducha, pero él se llevó la mano al corazón entre los aplausos de los pocos aficionados que aún no habían salido del estadio. Su cesión de una temporada está llegando a su fin y el hombre de los goles milagrosos regresará al Sevilla, club con el que tiene contrato hasta 2023, con el PSV al acecho.
sin jugar, Luuk Tuvo el emotivo momento que el destino le negó al otro cedido que no seguirá en el Barça aunque sí tuvo minutos y como titular. Adama Traorécon contrato con el Wolverhampton hasta 2023, no tuvo una despedida feliz porque su sustitución en el minuto 57 por Ousmane Dembélé Llegó justo después de su error en el despeje que costó el 0-2 de moi gomez. No se merecía un final así en un partido donde fue el único que intentó cosas y donde estuvo en la foto goleadora por su generosidad defensiva para ayudar a tapar la espalda desprotegida de daniel alves. Precisamente el brasileño si se llevó el cariño de la grada cuando estaba cambiado y le respondió con un saludo. ¿Despedida? El tiempo lo dirá, pero el brasileño quiere seguir.
También ha surgido que xavi ya se ha comunicado Óscar Mingueza, Riqui Puig, Samuel Umtiti y Martín Braithwaite que no cuenta con ellos para la próxima temporada. Aunque están predispuestos a marcharse, tienen contrato en vigor y es lógico que hasta que no sepan su destino no se despidan porque no sería la primera vez que uno acaba quedándose.
Y luego está el adiós Dembélé, que acaba contrato y sigue sin renovar. Pocos ya apuestan por su continuidad. Él, en un resumen de su estancia en el Barça, cambió los aplausos, tras un par de tiros, por los silbidos, tras un mal control, a los pocos minutos. Eso sí, ni un gesto ni una mueca en la cara que permita decir que se despedía del Camp Nou después de cinco años. El francés es indescifrable, como de costumbre.
Los denunciantes también fueron ganados por el equipo en general para el juego y para una temporada vulgar. Solo había lugar para unas risas con las calabazas de Mbappé al Real Madrid. Su nombre fue coreado. De un jugador del PSG, sí. Cosas de fútbol.
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Fuente: mundodeportivo.com