Los doce miembros del jurado popular y del tribunal técnico del juicio por el feminicidio de Nora Dalmasso, por el que Marcelo Macarrón es juzgado como instigador, Participaron hoy en una inspección ocular en la escena del crimen ocurrido en noviembre de 2006 en el barrio Villa Golf de la ciudad cordobesa de Río Cuarto.
La medida ordenada por el tribunal técnico de la Sala 1° Penal de Río Cuarto Se llevó a cabo en la casa número 627 de la calle 5ta de esa colonia privada, donde permanecieron más de una hora recorriendo los diferentes ambientes y la habitación donde se encontró asesinada a la víctima.
El primero en llegar a casa Alrededor de las 9 de la mañana, fueron los abogados defensores Marcelo Brito, Cristian Ayán y Marángeles Mussolini, quienes lo hicieron a bordo de una camioneta color gris y fueron recibidos por el mismo Macarrón (62), quien aún es dueño del inmueble.
Una hora más tarde, en un minibús privado especialmente alquilado, llegaron los integrantes del jurado popularmientras que el fiscal Julio Rivero y los jueces del tribunal técnico se hicieron presentes en diferentes vehículos particulares, en todos los casos custodiados por policías motorizados.
“Fue un recorrido para que todos podamos conocer mejor el escenario donde ocurrieron los hechos”, Dijo el fiscal Rivero alrededor del mediodía a la salida de la inspección ocular.
También aclaró que No es una reconstrucción del hecho, sino una medida de reconocimiento del lugar, como espacios, ingresos y gastos que permitan la comparación con las exposiciones testimoniales y que, de esta forma, “contribuyan a una mejor valoración de la prueba”.
El fiscal Rivero dijo a la prensa que la medida ordenada por el tribunal técnico es «muy interesante».
Además Carina del Valle Flores, empleada doméstica del matrimonio Dalmasso/Macarrón a la fecha del crimen, fue trasladada en un celular de la policía cuando estaba convocado por el tribunal y las partes para guiarlos al interior de la casa, con el objetivo de identificar cada espacio de la casa y responder preguntas sobre las modificaciones realizadas en el hogar, además de rutinas y movimientos familiares.
Por orden del juzgado se colocó un cerco policial a unos 20 metros de la entrada al domicilio de Macarrón, un cordón establecido específicamente para impedir el ingreso de la prensa.
A quien se le pudo ver asomándose en varias ocasiones fue a Pablo Radaelli, el primer vecino que ingresó a la casa de Nora y descubrió el cuerpo de Nora en la cama de la habitación de su hija Valentina, en el piso superior de la casa.
Después de la inspección ocular, todos los miembros vinculados al ensayo se trasladaron a la sala de audiencias de los Juzgados de Río Cuarto donde se exhibió un croquis en 3D y proyectó una simulación virtual de la reconstrucción del hecho, para luego pasar a Trimestre intermedio hasta el martes de la próxima semana.
Mañana no habrá audiencia por las obras de mejora que se están realizando en el juzgado, informaron desde el juzgado.
Macarrón, el único imputado
El viudo, cirujano, afronta este juicio como único imputado por el delito de «homicidio calificado por el vínculo, por alevosía y por promesa de precio o remuneración en concurso ideal», que contempla la pena de cadena perpetua.
La acusación del fiscal sostiene que presuntamente unos meses antes del 25 de noviembre de 2006, Macarrón «en un acuerdo delictivo con personas aún no identificadas por la investigación, instigó el crimen de su mujer por desavenencias matrimoniales».
Agrega que mientras el imputado se encontraba en la ciudad de Punta del Este participando en un torneo de golf, entre las 20:00 horas del 24 de noviembre de 2006 y las 03:15 horas del día 25, al menos una persona ingresó a la casa de Nora, en un barrio Villa Golf de la ciudad de Río Cuarto, describe la acusación.
El homicida, “aprovechando la indefensión de la víctima, esperó a que realizara su rutina previa al descanso y se acercó a Nora Dalmasso una vez dormida en la habitación de su hija, ubicada en el piso superior de la casa”.
En estas circunstancias y “cumpliendo el plan criminal previamente pactado con Macarrón y sus secuaces, la agarró por el cuello, ejerciendo una fuerte presión con las manos, anulando así toda posibilidad de defensa”.
A continuación, “utilizó el cinturón de la toalla de la bata de baño que estaba en la habitación, haciéndole un apretado doble lazo al cuello, causándole la muerte por asfixia.
Con información de Telam y otras fuentes de noticias.